La instrucción de la causa estará lista a finales de año, según las previsiones

A tenor de la marcha que llevan las diligencias que se están practicando, es previsible que la instrucción esté lista para finales de año, siempre que las partes no presenten nuevas propuestas y a la espera de que algunos de los análisis bioquímicos y las pruebas técnicas de los teléfonos de las tres acusadas ofrezcan resultados esclarecedores que no fuercen a llevar a cabo nuevas actuaciones.

El Ministerio Fiscal entiende que hay suficiente carga probatoria como para incriminar a las tres sospechosas. Las defensas discrepan y mientras que en el caso de Montserrat González, autora confesa y de su hija Triana Martínez, hay pendiente de realización un estudio de condiciones mentales para evaluar posibles trastornos (que pudieran influir en el proceso a efectos de ser considerados atenuantes), la defensa de Raquel Gago, la agente de la Policía Local, sostiene que no hay pruebas concretas contra su cliente y solamente por indicios no se puede mantener una acusación aunque indirectamente estaría dispuesto a considerar que en el caso de Gago se produjo un encubrimiento.

La intención de la instructora y del Ministerio Fiscal es agilizar al máximo los procedimientos para intentar que en torno a la próxima primavera se pueda celebrar el hipotético juicio oral que se ordenará abrir en cuanto concurran las circunstancias necesarias para ello, de acuerdo a los datos obtenidos por este periódico.