El comercio desmiente el acuerdo con el Ayuntamiento sobre la zona de libre horario

La propuesta de declaración de Zona de Gran Afluencia Turística en la parte amurallada de la capital es un «mal menor» en el caso de que no prospere la lucha que el comercio leonés está dispuesto a mantener «hasta el final» para frenar la intención del Gobierno de ampliar los horarios comerciales; pero el sector desmintió ayer que se hubiera logrado un acuerdo con el Ayuntamiento para hacer esta propuesta. El Ayuntamiento está obligado a hacer una propuesta sobre la zona que debe abarcar esta liberalización comercial que enviará a la Junta, si no quiere que el Gobierno opte por permitir aperturas con limitaciones mucho menores a las que existen actualmente.

Las distintas asociaciones de comerciantes de la ciudad, que ayer aseguraron hablar «con una sola voz», insisten en que su objetivo es demostrar que León no suma más de 600.000 pernoctaciones de turistas al año, una cifra recogida por el Instituto Nacional de Estadística que mete a la capital en la lista de Zonas de Gran Afluencia Turística y en el plan de promoción del comercio ligado al turismo de compras.

«No nos lo creemos, nos están tomando por tontos y no lo consentiremos. La zona anunciada por el Ayuntamiento tras la celebración del Consejo de Comercio es una acotación por si no podemos demostrar que estas cifras no son ciertas», insistió ayer Juan Hernández Dopico, presidente del Centro Comercial Abierto León Gótico, que actuó como portavoz del sector comercial en un desayuno con los representantes del PSOE en las distintas instituciones, y con miembros de los sindicatos.

El empresario reconoció que incluir a la zona del casco histórico en este programa y permitir abrir seis festivos no cambia la situación actual, ya que la ley permite abrir cuando quieran a los pequeños comercios y en la zona no se incluye ninguna gran superficie; pero advirtió de que la medida «puede abrir la puerta a ampliaciones posteriores. Porque aquí las normas cambian en cualquier momento».

Cesión a los grandes

Los comerciantes leoneses acusan a las administraciones de ceder a los intereses de la grandes superficies en detrimento del comercio local, «que es el que mantiene el empleo estable, el que vertebra las ciudades y el que permite que sus trabajadores puedan conciliar su vida laboral y familiar». Un modelo que resulta imposible si se amplían las aperturas en más festivos. «Además la demanda es la que es. No se compra más porque se abra más días. Y cada vez que abrimos un domingo, luego estamos hasta el viernes sin vender nada».

Los comerciantes leoneses exigen además que se les entreguen las cifras de la Policía Nacional sobre el registro de turistas que pernoctan en los hoteles de la ciudad, y critican los fallos que en su opinión tiene la encuesta del INE. «Si fueran ciertos, supondría que cada día habría en la capital 1.700 turistas. Y eso todos sabemos que no es real», señaló Javier Menéndez, presidente de la Asociación Leonesa de Comercio (Aleco).

Subsistencia

Menéndez insiste en que la situación del comercio local es «gravísima, de subsistencia»; y que «con casi 50.000 parados no hay consumo. Abrir más no es la solución. Estamos tocados de muerte y además seguimos sin liquidez, lo que dicen sobre la financiación es falso. Y esta ley es la gota que colma el vaso».

Juan Hernández Dopico critica también que la Junta de Castilla y León «esté absolutamente callada desde que ha comenzado esta polémica».

En cualquier caso, los comerciantes se mostraron ayer dispuestos a retomar en septiembre «con todas las fuerzas y toda la unidad» la pelea para evitar una liberalización de horarios que consideran que sería la puntilla para el sector. «Lo que tenemos que hacer es luchar todos juntos por el turismo, porque León tiene muchos activos. Ese sí es un interés común, ojalá vinieran a la ciudad muchos más turistas de los que dicen las estadísticas. Ese es el objetivo».