La autoestima ya está ‘Clara’

Dicen que el sentirnos listos o tontos, capaces o incapaces, gustarnos o no, condiciona la realización de nuestro potencial personal y nuestros logros en la vida. Por eso el programa Clara, de insercción sociolaboral de mujeres en situacion o riesgo de exclusion, que ha desarrollado durante dos años el Ayuntamiento de Villaquilambre, ha gustado tanto a su patrocinador, el Instituto de la Mujer.

La entidad valora el Clara del municipio como el mejor de los ocho puestos en marcha en España, al haber logrado elevar la autoestima de sus usuarias y cambiar la visión pesimista de sí mismas con la que comenzaron el programa por otra en la que saben apreciar más éxitos que fracasos. También destacan la «buena» selección de las empresas donde han efectuado parte de la formación y las prácticas.

Ellas no se engañan, «el trabajo llegará cuando pase un poco la crisis», pero el esfuerzo que han realizado de la mano del programa Clara las ha devuelto la confianza en ellas mismas, las ha hecho más fuertes «y más positivas», concluyen cinco de las participantes pioneras, Sonia, Celeste, Beatriz, Esther y Noemí, que tienen entre 49 y 32 años, de dos a tres hijos a su cargo, y varios años de desempleo. Consideran que el mayor logro del programa es que del grupo de mujeres «ha surgido una gran familia en la que nos apoyamos psicológicamente unas a otras en lo que haga falta». De hecho, una de ellas ha decidido volver a estudiar, otra, convertirse en escritora, y juntas, quizás, crear su propia empresa de emprendedoras.

Valoran «mucho» la labor de la motivadora y la técnico del Ciami, que fueron «un pilar fundamental en cambiar nuestra actitud. Nos han bajado al suelo, cuando hacía falta, y levantado cuando veníamos hundidas, sin trabajo, con problemas por los niños y con pocas esperanzas», admiten. «También han sabido sacar y exprimir el potencial que teníamos», remarcan. El programa Clara arrancó en octubre de 2013 con la fase de desarrollo personal, a la que acudieron 28 mujeres, que trabajaron divididas en dos grupos dos días a la semana en sesiones de tres horas y media. La segunda fase, de insercción, comenzó en enero y ha permitido a 18 usuarias seguir un curso de atención integral al cliente en la Clínica San Francisco, de 50 horas teóricas y 50 prácticas; otro de cajera reponedora en Brico Depot, también de 100 horas, al que acudieron 9 mujeres (y se ha contratado a 3); y de operadora de logística en Inditex, más amplio, de 150 horas, al que acudieron 17 mujeres. El Ayuntamiento ha sumado, con fondos propios, cursos de informática, operadora de carretilla elevadora y hierbas aromáticas.