SUCESOS
Caen ocho personas por el robo de vehículos de alta gama en la provincia
El valor de los coches recuperados por la Guardia Civil supera los 300.000 euros
«Es una operación que llevaba desarrollando la Guardia Civil desde hace mucho tiempo, con doce vehículos recuperados, once de ellos en León. También robaban en viviendas y se ha detenido a ocho personas y esclarecido numerosos robos», explicó el subdelegado de Gobierno para la provincia, Juan Carlos Suárez-Quiñones. «Son actuaciones que no dan mucho que hablar normalmente, pero quiero felicitar a la Guardia Civil por el trabajo realizado», insistió.
Las palabras del representante del Gobierno en la provincia corroboraron la importancia de la actuación de la Benemérita.
Fue en el marco de la fase de explotación de la «Operación Trespuntas». Ocho personas detenidas, con edades comprendidas entre los 23 y 46 años de edad, todos ellos con domicilio en la provincia de León, como presuntos autores de los delitos de robo en vivienda habitada, robo de uso de vehículos, falsedad documental, estafa, apropiación indebida y pertenencia a grupo criminal.
Las investigaciones llevadas a cabo por la Unidad Orgánica de Policía Judicial de la Guardia Civil de León, se iniciaron el pasado mes de mayo tras ser detectados en las provincias de León y Toledo varios vehículos de alta y media gama, valorados en cerca de 300.000 euros, que circulaban por la provincia con placa de matricula falsificada, los cuales habían sido sustraídos en las provincias de Alicante y Murcia tras haberse apoderado de sus llaves del interior de las viviendas de sus legítimos propietarios.
Centradas las investigaciones en los usuarios habituales de los vehículos detectados, se descubrió la presencia de otros turismos propiedad de empresas de alquiler de vehículos con sede en Madrid y Barcelona, los cuales tras ser alquilados con documentación falsa nunca fueron devueltos a las empresas propietarias de los mismos.
Analizadas conocidas paginas web de compraventa de objetos, tal como publicó en exclusiva este periódico, se descubrió la presencia de vehículos de similares características que los detectados, constatándose en las investigaciones que eran los mismos vehículos, varios de los cuales ya habían sido vendidos a terceras personas que los adquirieron de buena fe resultando haber sido estafados por los vendedores quienes se esgrimían como sus legítimos propietarios presentando documentación falsa.
Tras la determinación del «modus operandi» las investigaciones se centraron en tratar de determinar la existencia de un grupo criminal dedicado a la comisión de diferentes hechos delictivos contra el patrimonio, así como en la plena identificación y papel que ocupaba cada uno de sus integrantes, determinándose claramente quienes se encargaban de localizar y sustraer los vehículos.