Un hilo de solidaridad

Horas después de que el Ayuntamiento de León decidiera por unanimidad concederle el premio a la Labor Solidaria del año 2015 se apagó Soledad Fernández. Se fue con el premio que reconoce su entrega desinteresada durante años, como defendieron los representantes del Teléfono de la Esperanza, encargados de promover la candidatura y agradecidos por los años de voluntariado en un servicio que nació para atender a los que necesitan que les escuchen, los que han salvado tantas vidas colgadas de un hilo telefónico. Ahora, sonará el teléfono y ya nos descolgará al otro lado «Sole», como la conocían sus amigos y también sus compañeros en los servicios asistenciales del consistorio, donde desempeñó durante más de dos décadas las funciones de trabajadora social para todo tipo de necesidades, siempre dispuesta en las dependencias del ceas de Padre Isla. Su funeral se celebrará hoy a las 12.30 horas, en la iglesia de San Julián Alfredo, radicada en el Área 17, en las inmediaciones de Espacio León, antes de que sea incinerada en la intimidad familiar.

Junto con Soledad Fernández, el Ayuntamiento ha decidido premiar en la modalidad de colectivos la Labor Solidaria desarrollada por la Asociación de Lucha Contra la Leucemia y Enfermedades de la Sangre (Alcles). Una pequeña organización que apoya a decenas de familias gracias a los voluntarios que durante los 20 años de su andadura han donado su tiempo sin reclamar nada a cambio: un ejemplo de solidaridad.