Las empresas empiezan a despedir operarios por el parón en el túnel de Pajares

La referencia temporal con la que se cuenta es el 7 de enero, pero no hay fecha cerrada. De momento los trabajadores han recibido el aviso de que seguirán de permiso de forma indefinida, aunque con la advertencia de que deben estar localizables en cualquier momento, según les trasladaron ayer desde la UTE concesionaria de las obras, formada por las constructoras San José y Peninsular de Contratas; las cabezas visibles de un entramado de subcontratas en el que están Transia y Orión, la última de las cuales emplazó a última hora de la tarde a parte de sus más de 40 empleados para que pasen hoy a por las cartas de despido. Todo parado hasta que la Dirección General de Minas emita el informe en el que debe concretar las medidas necesarias para garantizar la seguridad de los operarios que trabajan en los túneles, después de dos accidentes en menos de cuatro días que se saldaron con seis intoxicados por la deficiente ventilación asistida, según las observaciones de los técnicos.

Pese a que Minas ya cursó visita a la obra el martes, CC OO registró una denuncia en la que solicita «la investigación de lo ocurrido, dado que, si por cualquier otra acción u omisión se vulnera la normativa en materia de seguridad minera y se pone en riesgo laboral, sería, según la normativa, objeto de infracción grave o muy grave».

Dentro de la denuncia se hace constar que el sindicato «tiene conocimiento de que la ventilación existente en los túneles es únicamente de origen primario», debido a que «está abierta la salida y entrada de las galerías o túneles», lo que hace que «dado el volumen de empresas y maquinaria actuante» se origine «acumulación de gases». Una situación provocada, «entre otras causas, por el abandono de las funciones de vigilancia de las condiciones de seguridad y salud de los trabajadores, siendo así que la ventilación asistida no se pone en funcionamiento y no estaba arrancada el día 2 de los corrientes, ni en los anteriores, todo ello en perjuicio de los trabajadores» y, a su «modo de ver, con la única finalidad de reducir costes en una materia tan importante». «El origen es la mala combustión de maquinaria usada en la parte asturiana de la obra, apuntando como muy posible el empleo de compresores para suministro de iluminación en el interior de los túneles», recalca CC OO en el escrito registrado en el la Inspección de Minas, dependiente de la Junta.

El documento reserva además dos apartados para hacer referencia a la situación laboral de los operarios de la Variante de Pajares. CC OO pone en conocimiento de la inspección que «las jornadas exigidas a los trabajadores son de doce horas diarias, aumentando con ello los tiempos y riesgos de exposición», al tiempo que incide en que «no existen comedores ni aparatos para calentar las comidas a pesar de la prolongada jornada a que se somete a los trabajadores».

Mientras, la empresa San José volvió ayer a guardar silencio ante las acusaciones que la apuntan de manera directa.