Diario de León

SUCESOS

El acusado de violar a su hija en Lucena ya había abusado de una prima de 11 años en Ponferrada

Fue condenado a 24 años de prisión por la Audiencia Provincial de León en 1995

Los acusados en una imagen obtenidas a través de las redes sociales.

Los acusados en una imagen obtenidas a través de las redes sociales.

León

Creado:

Actualizado:

Manuel Blanco Santiago, un varón de 39 años natural de Málaga que resultó detenido ayer en Fuengirola acusado de violar a su propia hija de seis años en Lucena (Córdoba) amparado por el encubrimiento de su propia esposa, ya había sido condenado por la Audiencia Provincial de León a una pena de 24 años de prisión (sólo cumplió 12) por dos delitos de violación cometidos entre agosto y noviembre de 1994 en Ponferrada contra una prima suya berciana de 11 años de edad entonces. El acusado tenía 20.

El detenido fue enviado a prisión ayer, junto a su esposa. Hace diez días, la pareja acudió a un centro sanitario de Cabra (Córdoba), ya que la menor presentaba una hemorragia, y en aquel momento la madre adujo que se debía a que había tenido un accidente de bicicleta.

Tras un análisis preliminar, los profesionales sanitarios determinaron que la niña sufría una hemorragia vaginal y varias contusiones, por lo que requirieron la presencia de un médico forense y dieron parte a las autoridades.

Posteriormente, la menor fue trasladada al Hospital Reina Sofía de Córdoba, donde permaneció internada durante dos días en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) y con asistencia psicológica.

Más episodios

La detención y el ingreso en prisión de Blanco Santiago no es su primer episodio con la justicia. La Sección Segunda de la Audiencia Provincial de León lo condenó a 24 años de prisión acusado de dos delitos de violación cometidos entre agosto y noviembre de 1994 en Ponferrada. No se pudo probar que hubo más agresiones, aunque se sospechó en el juicio que fue así.

El fallo se conoció en octubre de 1995. «Valiéndose del poder de influencia y atracción que ejercía sobre la niña» el condenado (fue obligado también a indemnizarla con dos millones de pesetas) mantuvo «relaciones sexuales plenas con penetración vaginal y rotura del himen de la menor en al menos dos ocasiones entre los meses de agosto y noviembre de 1994».

Convicción médica

La sentencia se basó fundamentalmente «en el testimonio de la víctima, que sin incurrir en contradicciones convenció al tribunal de que fue desflorada, hecho acreditado ginecológicamente».

Expuso el Magistrado que no cabía la posibilidad de que la pequeña hubiese denunciado a su primo por animadversión «puesto que confesó que no quería que le pasara nada malo y demostró de sobra su cariño hacia el mismo, por lo que se considera fiable el testimonio de la niña».

La familia de la menor consideró fue indemnizada a pesar de que el daño psicológico en el momento de los hechos fue calificado de «escaso» por los forenses. No obstante, la Audiencia aplicó el baremo teniendo en cuenta que se podía producir una evolución negativa en el futuro.

Su esposa, con la que tiene cuatro hijos más, además de la víctima de este ataque, también fue ingresada en prisión. Los niños están en manos de los servicios sociales de Andalucía.

tracking