La inspección valora las medidas correctoras en materia de seguridad

No queda ni rastro en Antibióticos de quel proceso de abandono que ocasionó un expediente de la Junta de Castilla y León para evitar cualquier producción en la fábrica por falta de medidas legales de seguridad. Lejos del aquel mayo del 2013 convulso, antesala del concurso de acreedores y la confirmación de la quiebra, Antibióticos presenta hoy una cara bien distinta, apuesta a aquella donde no se controlaba ni la leocilina: el sistema de detección y protección contra incendios está reparado y operativo; el sistema contra la intrusión está operativo; el plan de emergencia interior, de acuerdo con el decreto 1254/1999 ha sido redactado por la delegación territorial de León; se han tomado medidas oportunas para el cese del peligro que existía en relación con los productos químicos; se ha tenido en cuenta el análisis y evaluación de riesgos contemplados en el real decreto 1254/1999 por el que se aprueban las medidas de control de riesgos inherentes a los accidentes graves en los que intervengan sustancias peligrosas. Se libera la zona de estériles y el edificio 28 para las actividades industriales adecuadas a ese ámbito. El plan de recuperación de Antibióticos mantiene así aquella hoja de ruta de los propietarios, BTC, con 120 trabajadores con tarea diaria en la puesta en marcha de la fábrica (50 rotan en un expediente de regulación hasta que se amplíen los límites laborales y fabriles). Al final del ciclo, en los albores de primavera, esperan los clientes.