Campaña de la policía de San Andrés para vigilar perros peligrosos con multas de 30 a 1.500 euros

El Ayuntamiento de San Andrés del Rabanedo inició el pasado miércoles una campaña que se prolongará hasta el día 27 para vigilar a los perros peligrosos que puedan estar sueltos, o realicen sus deposiciones en la vía pública sin ser recogidas por sus dueños. Ambas acciones serán sancionadas por los agentes municipales, tal y como recoge la normativa, con posteriores multas que oscilan entre los 30 y los 1.500 euros. Además, la no tramitación de la autorización municipal para la tenencia de animales potencialmente peligrosos en los tres meses siguientes a su adquisición alcanza los 300 euros. La Policía Local ha puesto en marcha la campaña «debido a la cantidad de quejas que se reciben en el Consistorio cada día, tanto a través del Servicio de Atención al Ciudadano 010, como en las propias oficinas de la Policía Local de San Andrés», indican, y supondrá un incremento de la vigilancia en las calles del municipio.

Los efectivos policiales controlarán, en especial, los parques y zonas verdes y los lugares dónde se han registrado el mayor número de quejas, como los barrios de Paraíso Cantinas y La Sal, y Trobajo del Camino, en el entorno del Lidl. El año pasado, el 010 recogió un centenar de quejas por estos animales. La legislación actual sanciona a los propietarios de perros que dejen a sus mascotas sueltas en la calle y que no recojan los excrementos. El Ayuntamiento es quien comunica la multa a la Junta, que tramita el expediente y recauda el dinero de las sanciones si procede. El censo canino actual está integrado por 1.268 perros, 133 de ellos peligrosos. Cada año se censan una media de 20 nuevas mascotas de las razas que están consideradas como peligrosas (Pit Bull Terrier, Staffordshire Terrier, American Staffordshire Terrier, Rottweiler, Dogo Argentino, Fila Brasileño, Tosa Ini Y Akita Inu). El año pasado se dieron de alta 130 nuevos perros, frente a los 102 de 2013.

Se ha detectado un aumento del número de adolescentes que poseen un perro de estas características como mascota. Todos ellos deben de llevar bozal en lugares públicos, además de que una persona los controle con cadena. La ordenanza que regula la Tenencia de Animales Potencialmente Peligrosos prohíbe tenerlos en espacios exteriores como galerías o terrazas. Además los propietarios de canes de compañía podrán ser denunciados por ocasionar molestias a sus vecinos. Los perros no pueden acceder libremente a vías y espacios públicos, ya que deben ir conducidos por sus dueños con correa y bozal. Tampoco beber o bañarse en las fuentes. El dueño está obligado a censar al animal mediante microchip homologado. En dos días de campaña, la Policía ya ha puesto varias sanciones.