El 70% de las pruebas de cáncer de colon en León detectan alguna anomalía

El programa de detección precoz de cáncer de colon implantado hace un año por la Consejería de Sanidad ha detectado alteraciones en siete de cada diez personas que se han hecho las pruebas. Los test para descubrir sangre en las heces y las colonoscopias realizadas en el Hospital de León muestran cambios anormales en el colon en el 70% de las 5.334 personas que acudieron para hacerse la revisión tras recibir la carta con la cita en su domicilio, una cifra que sorprende a los responsables del programa ya que es un 40% superior a la media de las personas que se hacen pruebas fuera del programa. Los responsables sanitarios enviaron el año pasado 17.800 cartas dirigidas a personas con edades comprendidas entre los 65 y los 69 años, los primeros en entrar en el programa, pero sólo respondieron el 30%, una cifra que el director médico de Atención Primaria y coordinador del programa, José Luis Palomo, considera todavía insuficiente. «El objetivo es llegar como mínimo al 40%», explica.

La utilidad de las pruebas está demostrada. La detección precoz salva al año 3.000 vidas en España. Pese a que los habitantes de la provincia de León tienen un 40% más de posibilidades de padecer cáncer de colon, según un estudio en el que trabajan los investigadores de la Universidad de León y el Hospital, la respuesta a este programa es tibia. Los resultados obtenidos hasta ahora demuestran el beneficio de hacerse pruebas preventivas. Las colonoscopias— se hacen dos meses y medio tras detectarse la sangre en las heces— han destapado un 10% de cánceres, un 3% más de la media del país, que está en el 7%. De las 508 personas a las que se descubrió sangre en las heces, 163 tenían pólipos cancerígenos, adenomas de alto riesgo que desconocían tener, sin síntomas, que en un plazo no superior a cinco años hubieran dado la cara con un peor pronóstico. La detección de estas alteraciones ha permitido tratar a los pacientes precozmente y evitar el desarrollo de la tumoración.

«Es muy importante que las personas que reciben la carta vayan a su médico de cabecera para hacerse la prueba del test. Es muy sencillo, nada molesto para el paciente y salva muchas vidas», explica el presidente provincial de la Asociación Española contra el Cáncer, Serafín de Abajo Olea.