Una vecina de Nava denuncia la instalación de un corral de ganado en el casco urbano

Una vecina de la calle La Cerrada, de Navatejera, denuncia desde hace un año sin éxito la instalación de un corral de ganado junto a su vivienda, a pesar de estar clasificado el suelo de la zona como urbanizable. «Tengo una terraza, y al estar el abono de los caballos ahí, el olor y los bichos son insoportables», lamenta. La mujer, que ha acudido al Seprona, al Ayuntamiento y a la Junta, solicita que los dueños de los animales «no los ceben en la parcela y retiren el corral», ya que, según la legislación, «está prohibida la implantación de instalaciones ganaderas fijas a una distancia inferior de 300 metros de suelo urbano», resalta. También destaca que el artículo 8 de la ley de salubridad obliga a la clausura de actividades ganaderas no distanciadas de zonas residenciales si se detectan ruidos, olores, insalubridad o cualquier infracción medioambiental. «Llevo viviendo ahí 27 años y nunca me molestaron los caballos pastando, pero ahora con el corral y estar día y noche no podemos ni abrir las ventanas», asegura. El propietario de los caballos es vecino de Villaobispo y,0 según la denunciante, carecía de licencia agropecuaria cuando puso los hechos en conocimiento de la administración. Aspecto que solucionó posteriormente.