triBUNALES
Detenida una mujer relacionada con el crimen del leonés asesinado en Cádiz
Quiso deshacerse del arma homicida tirándola al mar pero los GEO la encontraron.
La policía inspecciona el vehículo.
Una mujer se convirtió semanas atrás en la cuarta persona detenida en relación con el crimen del leonés Ángel Rodríguez Pérez, gerente de Oh Palace, cuyo cadáver apareció en el interior de un vehículo calcinado con un disparo en la cabeza.
El dato se conoció anteayer tras el levantamiento del secreto del sumario por parte del juzgado de Instrucción número 1 de los de El Puerto de Santa María, que es el que conoce de la causa. Tres personas más permanecen en prisión, por su presunta participación en los hechos.
De acuerdo al relato que la Policía Nacional hace de lo sucedido, la víctima se había granjeado la enemistad de un importante empresario también relacionado con los clubes de alterne de la zona, con el que había entrado en conflicto por un asunto de dominio territorial. Habían sido socios, de las desavenencias se generaron grupos rivales en cuanto a intereses y al final el asunto terminó en amenazas varias que acabaron por ejecutarse.
Así, el principal encausado ideó un plan para acabar con la vida del leonés, en el que contó con la colaboración de otro conocido propietario de varios clubes de alterne de Sevilla. La policía le atribuye la autoría de la incineración del vehículo en el que se encontró el cadáver y considera que también es el responsable de varias actuaciones de obstrucción a la investigación. El tercer procesado es el autor material de los disparos.
Gracias a los GEO
La investigación cerró el círculo con la detención de la cuarta sospechosa, una mujer que estaba al tanto de lo ocurrido y colaboró con los anteriores deshaciéndose del arma homicida. La tiró al mar desde un espigón de Puerto Sherry. Fue recuperada con la participación de buceadores expertos del Grupo de Operaciones Especiales (GEO).
La muerte del leonés se produjo el 25 de febrero pasado y su cadáver fue hallado al día siguiente. Pese a la complejidad del asunto, los agentes lograron resolver el tema y poner a disposición judicial a los supuestos autores de lo ocurrido. Ahora la instrucción sigue la vía judicial hasta que se determine si se formula escrito de acusación contra los sospechosos y si procede la apertura de juicio oral.