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Comienza la reforma de las piscinas para evitar fugas y adaptar el sistema eléctrico

Piden prorrogar un mes más el plazo para renovar las instalaciones de baja tensión.

Un operario trabaja en la mejora del vaso de la piscina grande de San Andrés para evitar fugas.

Un operario trabaja en la mejora del vaso de la piscina grande de San Andrés para evitar fugas.

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p. infiesta | san andrés
León

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El concejal de Deportes del Ayuntamiento de San Andrés del Rabanedo, Pedro García, confirma que esta semana se han iniciado «importantes» obras de remodelación de las piscinas de San Andrés y Trobajo del Camino, de cara a la nueva temporada estival que dará comienzo en estas instalaciones el 1 de julio y 22 de junio, respectivamente.

La reforma que más urgía tras los seis meses dados de plazo por la inspección el pasado noviembre, y que finalizaban ayer, era la renovación de elementos eléctricos. Una cuestión «que significa cambiar las instalaciones de baja tensión, que están bien, pero con el paso del tiempo ya no cumplen la normativa actual y hay que adaptarlas», explica. El Ayuntamiento ha solicitado a la Junta un aplazamiento de un mes para poder concluir estas obras, valoradas en 30.000 euros y adjudicadas a Prial.

En el caso de la piscina de San Andrés ya se están realizando los trabajos necesarios para reparar la fuga de agua de la piscina grande (de 120 m3 diarios), un problema que fue atenuado en 2014 con el rellenado diario. Así mismo, se procederá a la renovación del equipo de depuración, que es muy antiguo y que ya causó numerosas averías la temporada pasada.

García remarcó que «es imprescindible acometer estas mejoras para poder abrir las piscinas de San Andrés, dado el estado en el que se encuentran».

Las reformas arrancaron con la demolición de la baldosa y prosiguen con el rascado del colas y nivelación del vaso. Posteriormente se colocará la nueva superficie que garantice el perfecto funcionamiento de la piscina y evite la fuga de agua y, como consecuencia el gasto en agua, cloro y productos de limpieza que se produjo la temporada pasada.

El servicio de Inspección de la Junta de Castilla y León volvió a visitar ambas piscinas el pasado jueves para supervisar si las deficiencias de las instalaciones de baja tensión apercibidas hace seis meses estaban solucionadas. «Todo está en marcha y confío que la parte eléctrica estará rematada en tres semanas», precisó. García recordó que, tras las dificultades del año pasado para reabrir las piscinas, la gestión municipal logró por primera vez en años ingresos en las taquillas de 47.771 euros, y un ahorro de 24.000 euros en un trimestre.

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