Casi 800 leoneses usan las farmacias para hacerse la prueba rápida de sida
Los test sólo han detectado 12 positivos en los cuatro años de prueba piloto.
Casi 800 leoneses han recurrido a las farmacias para hacerse una prueba rápida de sida, que han detectado 12 positivos hasta ahora. Los usuarios de este servicio son personas que han tenido una práctica de riesgo y quieren conocer cuanto antes si están infectados con el virus. El plan piloto que comenzó a funcionar en 2010 tras un convenio entre la Consejería de Sanidad y el Consejo de Colegios Profesionales de Farmacéuticos de Castilla y León (Concyl) permite a los usuarios conocer en quince minutos si tienen el VIH. Los pacientes, el 76% hombres, acuden a las farmacias «por comodidad y rapidez», asegura el presidente del Colegio de Farmacéuticos de León y presidente del Consejo de Colegios Profesionales de Farmacéuticos de Castilla y León, Antonio Carrasco.
Los usuarios de este servicio pagan cinco euros por la prueba, que se pueden tres oficinas de León: Joaquín Carrasco en la calle Máximo Cayón Waldaliso; Rogelio Fernández, en Gran Vía de San Marcos; y Marta Rodríguez, en la avenida de España de Ponferrada. «Las farmacias se han seleccionado buscando una distribución homogénea que permita la atención a toda la población de Castilla y León», asegura Carrasco. 16 farmacias de toda la Comunidad forman parte de esa experiencia piloto (1 en Ávila, 2 en Burgos, 3 en León, 1 en Palencia, 3 en Salamanca, 1 en Segovia, 1 en Soria, 3 en Valladolid y 1 en Zamora). En los cuatro años de pruebas, las farmacias de la Comunidad han hecho 4.677 pruebas, 65 positivos. León es la tercera provincia de la Comunidad con más pruebas realizadas, por detrás de Valladolid, en la que se ha hecho 1.422 test, y Salamanca, con 1.179. El mayor número de positivos lo tiene Valladolid, con 27 muestras con el virus. Las que menos, Ávila y Zamora, con 1 cada una.
El test descarta el virus. «Es un cribado negativo, cuando en la prueba se detectan indicios de la presencia del virus se remite al paciente al médico para que le confirme el resultado y haga su seguimiento», asegura Carrasco.
La prueba se realiza con un pinchazo en el dedo y los resultados se reflejan en una tira reactiva. «Los test que hacemos son de última generación y consiguen dar un resultado fiable a los tres meses de la exposición de riesgo. Las personas que se acercan a las farmacias vienen preocupadas pero se van aliviados al conocer que el resultado es negativo», asegura Joaquín Carrasco, vocal de Pacientes del Colegio de León.