El Pleno aprueba la Cuenta General sin apoyo de IU, que duda de su veracidad

La Cuenta General de 2014, el documento que el Ayuntamiento debe remitir por Ley al Consejo de Cuentas para su fiscalización antes del 1 de octubre, fue aprobada ayer en el Pleno de San Andrés con los únicos votos del PP, que gestionó la economía municipal ese año, y del actual equipo de Gobierno PSOE-PAL. Ciudadanos y UPL se abstuvieron, mientras IU mostró su oposición al texto «por no reflejar» fidedignamente, a su juicio, la situación de las arcas del Consistorio el año pasado. La concejala Laura Fernández explicó que se recogen 8 millones de derechos reconocidos pendientes de cobro, «cuando parte han prescrito, desconociéndose cuánto deben los terceros al Ayuntamiento». Tampoco cree que La Cuenta General sea fiel en la deuda del agua, con decenas de recibos devueltos, ni en el plan de pago a proveedores, al «no existir un arqueo de seguimiento». Respecto a la recaudación, considera que para saber que los ingresos son reales se necesita una memoria de Tesorería, «que no existe y que hace decir al interventor que no puede responder ante la veracidad de esas cantidades, así que IU menos». Fernández también echó de menos que el resto de informes preceptivos no hayan sido realizados por el interventor, sino por Contabilidad, y que no se haya llevado a Pleno la liquidación del presupuesto de 2014. «Está claro que, técnicamente, la Cuenta no refleja la situación del Ayuntamiento en 2014», insistió. La alcaldesa, la socialista María Eugenia Gancedo, le replicó que el jefe de Contabilidad forma parte del departamento de Intervención. La regidora consideró «muy fuerte» que IU cuestionara «el trabajo de los técnicos» de la casa, y preguntó a la concejala «¿cómo puede decir que el documento no es de fiar cuando es técnico y está claro que esos datos son reales y son ciertos?». Gancedo defendió la Cuenta General, que «no la gestión que refleja», matizó, porque si los datos fueran erróneos «sería de chiste que trajéramos a aprobar unas cifras que supervisará el Consejo de Cuentas». El documento indica que el remanente negativo de tesorería de 4,5 millones, las facturas sin aprobar de 6 millones y los adeudos de 4,5 millones del agua suman una deuda de 15 millones. UPL cree «que hay muchos deberes por hacer» con ese panorama, y el PAL espera que las medidas puestas en marcha por el Gobierno actual vayan dando sus frutos. «La alcaldesa ha mandado directrices a todas las áreas para recortar todo lo que no sea necesario, revisar los contratos en vigor y eliminar situaciones gravosas», indicó.

En la sesión también se dio luz verde a la aprobación provisional de un cambio en el PGOU para que el sector SUNC-23, situado entre la glorieta de Donantes de Sangre y el Lidl, se pueda adaptar a la posible llegada de la cadena de supermercados Gadis. En marzo ya se había dado el primer paso y tras estimarse parcialmente la única alegación presentada, de IU, ahora sólo falta el okey de la Junta. La Corporación aceptó agrupar el terreno reservado para uso terciario de ese sector de 29 hectáreas en una parcela de 4.000 metros cuadrados, como requiere la empresa de alimentación. La inversión para construir la tienda rondaría el millón de euros y se generarían unos 30 empleos directos. El establecimiento, de 1.500 metros cuadrados, dispondría de aparcamiento.