La banca se divide e intenta eludir la retroactividad

Las sentencias y decisiones sobre las cláusulas suelo han provocado distintas reacciones en las entidades financieras españolas. BBVA, Abanca y Cajamar tuvieron que retirarlas tras la sentencia judicial de mayo de 2013; Caixabank y Bankia han anunciado su eliminación y actualmente las mantienen en sus carteras Unicaja (con Ceiss), Popular, Sabadell, BMN, Liberbank e Ibercaja. Se muestran dispuestas a analizar casos particulares, pero consideran que sus cláusulas son transparentes, y no deben retirarlas.

Este mes el sector ha llegado a un acuerdo con el Gobierno, por el que la mayoría de las entidades pretenden suprimir las cláusulas suelo de ahora en adelante. A cambio de no tocar el tema de la retroactividad. Eso sí, reclaman que a cambio los clientes renuncien a cualquier acción judicial para reclamarla si llegan a un acuerdo con su banco.

Hasta ahora estos acuerdos pasaban por retirar la cláusula a cambio de compensaciones, tanto en un incremento del tipo de interés como en la contratación de otros productos, como seguros y planes de pensiones. Ahora, el Gobierno reclama que se supriman sin pedir nada a cambio.