INICIATIVAS SOCIALES
La carrera más luciente de los taxis
Una decena de residentes de Virgen del Camino viajaron bajo las luces navideñas
Los cinco taxistas estaban esperando a la puerta de la residencia de ancianos Virgen del Camino como si hubieran recibido una llamada para una salida. Sin embargo, la carrera de ayer estaba organizada y había generado una gran expectación entre los residentes. Una decena de ellos se subieron con la ilusión que genera la Navidad en los más pequeños para ver la decoración de la ciudad, sobre todo, las luces que ponen el toque mágico a estas noches de fiesta.
«Nos ponemos el cinto», fue lo primero que le preguntó Manuela Testón a su taxista en suerte, Ángel Gallego. En el asiento del copiloto, estaba dispuesta a contemplar la ciudad. Tras ella, Floripes González, quien no dejó de mirar por la ventanilla durante todo el recorrido. «Yo vengo toda ilusionada, tenía muchas ganas porque hace mucho tiempo que ya no bajo a Ordoño de noche y mira que yo ando las tres marías, pero salimos poco», apuntó Manuela para explicar que en febrero del año pasado se trasladó a la residencia con su marido «que está muy malito» y al que a ella le gusta seguir atendiendo personalmente.
Por la plaza del Espolón llegaron a Ramón y Cajal y de ahí a La Torre para desembocar en La Inmaculada. «Mariano Andrés este año no está iluminada y mira que esa calle es importante que llega hasta los hospitales y la transita mucha gente», remarcó Manuela nada más llegar a la zona centro para reclamar al Ayuntamiento que en las calles principales «hay demasiadas luces y tienen que poner un poco más en las orillas, en los barrios».
Las reivindicaciones de esta asturiana de 81 años recién cumplidos y que ya se considera leonesa de pura cepa no se quedaron ahí. «Hay cosas más importantes que las luces y me gustaría mandarle un aviso al alcalde. Necesitamos más personal en la residencia, porque cuando alguien se pone de baja no lo sustituyen y al final vamos a tener que cuidarles nosotros a ellos en vez de al revés», dijo tajantemente.
«Qué bonito», «maravilloso», «esto es precioso», fueron algunas de las exclamaciones que no dejaron de decir las dos mujeres durante la carrera desde la residencia hasta San Marcelo, donde les esperaban las concejalas Aurora Baza y Margarita Torres para mostrales el belén. Sin duda, la calle que más les gustó fue Gran Vía de San Marcos: «Esas cascadinas de luces son una divinidad, el resto son más clásicas y ya las habíamos visto», dijeron las dos mujeres durante el recorrido, una propuesta surgida de los propios taxistas. El presidente de Radiotaxi, Raimundo Martínez, resumió la iniciativa con esta frase: «Sólo con ver su felicidad al bajarse del taxi ya te dice que ha merecido la pena».