Los donantes de órganos caen a la mitad y sitúan la tasa a niveles de hace 5 años
Los 17 fallecimientos permiten trasplantar 82 órganos a pacientes de toda España
El número de donantes de órganos ha caído a la mitad en León en el último año. Los 17 donantes (8 mujeres y 9 hombres) colocan la tasa de donaciones a niveles de hace cinco años. Los 30 donantes del año pasado supusieron un récord «difícil de superar», según explica la coordinadora de trasplantes del Hospital de León, Ana María Berrot. «No era razonable lo que ocurría. En los últimos cinco años hemos estado en una tasa de donación entre 50 y 55 por millón de habitantes, cuando la media nacional estaba en 40».
La caída es generalizada en todos los hospitales de la Comunidad. La explicación no está clara. Berrot no encuentra una razón clara para que se produzca este descenso. La edad de los fallecidos es cada vez mayor, aunque los especialistas recuperan órganos cada vez en mejor estado. «Es verdad que los fallecimientos se producen cada vez con más edad, pero eso no implica que los órganos no puedan ser válidos porque estamos recuperando órganos que están en condiciones óptimas de personas mayores de 80 años». La mayoría de los donantes fallecieron por infartos o hemorragias cerebrovasculares. Sólo hubo dos decesos por accidentes de tráfico, uno por una caída y otro por una agresión. El donante más joven tenía 20 años y murió en un accidente de tráfico.
Tampoco han aumentado las negativas. Sólo se ha contabilizado como negativa la imposibilidad de comunicarse con una familia de un fallecido de nacionalidad lituana «por falta de un interlocutor adecuado que impidió que se cerrara la donación. No hubo oportunidad para que dieran el consentimiento», explica Berrot.
Las edades de los donantes oscilan entre los 20 y los 89 años, aunque la edad media más frecuente está en la franja de los 60 y 75 años. Seis de las donaciones fueron multiorgánicas que permitieron extraer corazón, pulmones y órganos abdominales.
En el quirófano
El órgano más complicado de mantener en condiciones óptimas es el pulmón. Pese al descenso de los donantes, Berrot asegura que este año se han conseguido trasplantar ocho pulmones. «Es una estadística muy buena porque los pulmones se estropean pronto si no se mantienen en condiciones óptimas».
Los 17 donantes permitieron extraer 82 órganos. Además de los ocho pulmones, las donaciones permitieron la extracción de dos corazones, quince hígados, un páncreas, 36 riñones y veinte córneas, además de tejidos, huesos y tendones de diez donantes.
El tiempo siempre es un reto para coordinadores, especialistas y familiares. Para considerar la posibilidad de una donación de órganos el paciente tiene que estar en muerte cerebral. En el caso de los fallecidos en León, fueron las familias las que hablaron a los médicos de esta posibilidad. «La gente está muy concienciada. El descenso no se debe a que los familiares se nieguen, más bien al contrario. La mayoría de las autorizaciones son directas. No ha habido necesidad de plantearles la donación. Actualmente ya hay una gran aceptación de la donación. Muchas familias la ofrecen, pero por diversos motivos no siempre es posible».
No todas las personas que mueren pueden ser donantes. Los órganos tienen que estar en condiciones óptimas. «Aunque la gente se muere cada vez más mayor, el hígado y los riñones pueden valer. Hemos sacado riñones a personas de 89 años».
La extracción nunca dura menos de tres horas de quirófano, aunque hay órganos como el páncreas y los pulmones que puede alargarse más de cinco.
La coordinadora de León da el aviso a la red de trasplantes, que son los que buscan a los receptores compatibles en cualquier lugar del mundo. Son los especialistas del hospital de destino del órgano los que se trasladan a León para realizar la extracción y luego hacer el trasplante, excepto en el caso de los riñones, que son separados por los urólogos de León.