León remite al ‘Pacto de los alcaldes’ su propuesta para frenar el cambio climático
Su red de calor con biomasa y el fomento del transporte urbano y la bici, entre los planes para reducir contaminación.
El Ayuntamiento trabaja para definir su línea de actuación para contribuir a la reducción de emisiones contaminantes y su apuesta por las energías renovables, un plan estratégico para frenar el cambio climático que tiene que remitir al ‘Pacto de los alcaldes para el clima’. Fue el mes pasado cuando el Consistorio dio luz verde a su adhesión a este colectivo y se comprometió a asumir un enfoque transparente y colaborativo para reducir las emisiones contaminantes a nivel local, y a mejorar la resistencia al cambio climático de manera coherente y según los esfuerzos que se están llevando a cabo a nivel nacional e internacional.
Con el fin de posicionar a la ciudad como líder climática, así como demostrar que las acciones locales tienen un impacto global verdadero y significativo, las ciudades participantes deben seguir un proceso que consta de una serie de fases, que son las siguientes: compromiso, que ya se ha remitido, inventario, definición de objetivos, diseño de un plan de acción y reconocimiento como ‘Ciudad cumplidora’.
En las prácticas medioambientales del Ayuntamiento contra el cambio climático tienen cabida iniciativas como la Red de Calor con biomasa y el proyecto León XXI2, así como políticas de movilidad como el fomento del trasporte urbano y del uso de la bicicleta, o el uso de energías renovables, entre otras.
El ‘Pacto de los alcaldes’ es el principal movimiento europeo en el que participan las autoridades locales y regionales que han asumido el compromiso voluntario de mejorar la eficiencia energética y utilizar fuentes de energía renovable en sus territorios.
Con su compromiso, los firmantes del pacto se comprometen a reducir en un 20 por ciento sus emisiones de CO2 antes de 2020, así como a aplicar los nuevos objetivos de la Unión Europea a favor del clima para el año 2030; alcanzar un mínimo de reducción de emisiones de CO2 del 40 por ciento, conseguir un 27 por ciento de aumento de consumo de energías renovables y de mejora de la eficiencia energética y emprender una estrategia conjunta para abordar la mitigación y adaptación al cambio cimático.
Por otra parte, el ‘Pacto de los alcaldes’ es un compromiso a nivel mundial en el que se pueden implicar libremente las ciudades, con el fin de asumir estrategias que permitan reducir las emisiones contaminantes a nivel local, la vulnerabilidad ante la exposición a las mismas y mejorar la resistencia al cambio climático, de una forma coherente y de acuerdo con los esfuerzos que se están llevando a cabo a nivel nacional e internacional.