Los padres denuncian que todos los colegios «necesitan alguna obra»

Baños, patios, cableado eléctrico, reposición de cristales, puertas y ventanas y mejoras en las calefacciones. Estos son los principales problemas que detectan las asociaciones de madres y padres de los alumnos leoneses en los colegios de la capital y que en mayor o menor medida se extienden «a todos los colegios salvo al Camino del Norte, que es de nueva construcción», como explica la presidenta de la Felampa, Engracia Prieto, tras consultar con las diferentes asociaciones, desde donde especifican que a excepción del colegio del barrio de Eras, «todos necesitan algún tipo de obra o intervención, ya sea desde pintura a grandes intervenciones». Gran parte de los colegios de la capital leonesa se construyeron en la década de los 80 —sobre todo los que se reparten por los barrios periféricos— y los dos más antiguos de la ciudad son el Ponce de León y el San Claudio (construidos en 1936 y en 1959), según concretan desde Felampa, desde donde añaden que también es necesario llevar a cabo un plan de seguridad antiincendios, del que carecen gran parte de los centros.

El concejal de Obras del Ayuntamiento de León, Javier García-Prieto, anuncia que, pendiente de que se dé luz verde a los presupuestos el próximo jueves, el equipo de gobierno municipal ya ha reservado una partida de 250.000 euros. «El promedio de edad de los 18 edificios de los que es responsable el Ayuntamiento de León es de 50 años y algunas actuaciones ya sobrepasan la conservación y el mantenimiento y requieren intervenciones más costosas», matiza el edil en relación a que las administraciones locales son las encargadas de la conservación, el mantenimiento y la vigilancia de los centros escolares, mientras que la Consejería de Educación se responsabiliza de la obra nueva.

«El mantenimiento de los colegios tiene que ser anual, pero el volumen de gasto es muy alto y en los últimos años se han parado las obras», especifica Engracia Prieto, quien remarca que el estado de los baños de los colegios que se construyeron en los años 80 precisan de una gran intervención y que ésta es una de las primeras medidas que deberán llevarse a cabo ante el estado de los aseos. A esto suma el cableado eléctrico, que como en el caso del Lope de Vega, «es de cuando se construyó el colegio», a lo que añade el estado de los patios y la necesidad, en gran parte de los centros escolares, de una zona cubierta en la que los alumnos puedan realizar actividades como Educación Física. Desde la Felampa están pendientes de un encuentro con el representante municipal para abordar una posible hoja de ruta en la que se especifique cuáles serán las primeras actuaciones que se llevarán a cabo.

Más de 1,2 millones

García Prieto remarca que el Ayuntamiento ha estimado que si se contabilizaran las horas que dedican los operarios municipales a los centros escolares el presupuesto superaría los 1,2 millones de euros, «no se trata sólo del presupuesto, que este año triplicará partidas anteriores, sino que los colegios requieren una atención constante». Así, remarca que una vez que se dé luz verde a las cuentas municipales «se hará una selección de las prioridades y se comenzará a trabajar por aquellos centros en los que haya problemas en las estructuras del edificio y se valorarán cuáles son las necesidades más urgentes», teniendo también en cuenta el estado en el que se encuentran los baños. El concejal de Obras remarca que con un presupuesto incrementado para este apartado «las actuaciones serán tres veces mejor que las realizadas hasta la fecha».