Diario de León

EL JUICIO POR EL CRIMEN DE ISABEL CARRASCO

Un perito al abogado de Montserrat: "No hace falta un cursillo para disparar ese revólver, un niño podría hacerlo"

Otro perito citado en el juicio asegura que quien disparó el arma "estaba muy nervioso

Un miembro de Balística de la Policía Nacional, muestra un revolver al jurado en el juicio por la muerte de Isabel Carrasco

Un miembro de Balística de la Policía Nacional, muestra un revolver al jurado en el juicio por la muerte de Isabel Carrasco

Publicado por
MIGUEL ÁNGEL ZAMORA / ANA GAITERO | DESDE LA AUDIENCIA PROVINCIAL
León

Creado:

Actualizado:

"No hace falta un cursillo para disparar este revólver. Un niño podría hacerlo". Lo ha asegurado un perito citado esta mañana en el juicio por el asesinato de Isabel Carracso a preguntas del abogado defensor de Montserrat González, asesina confesa de la presidenta de la Diputación de León. También ha comentado que  Montserrat González, la asesina confesa, eligió un revólver para acabar con su vida para ocultar pruebas ya que este tipo de armas no expulsa vainas y dificulta la investigación, según han puesto de manifiesto un experto en balística.

“El calibre es pequeño pero suficiente para provocar efectos letales en distancias cortas, perfectamente manejable por una mujer. No muy pesada y fácil de llevar en un bolso”, explicó a preguntas del fiscal.

Durante la sesión, otro perito ha asegurado que el estado del revólver, en el que quedaron cartuchos sin percutir, revela que la persona que disparó estaba "muy nerviosa".

El arma homicida, un revólver Taurus de calibre 32 fabricado en Brasil, tenía borrada la numeración de serie -punzonada-, y fue imposible recuperarla por procedimientos químicos. Uno de los cartuchos que contenía no fue percutido, es decir, los disparos que hizo Montserrat no fueron consecutivos; algo que puede deberse a una manipulación previa del mismo o al nerviosismo de la autora en el momento de los hechos, según explicó el perito.

La pistola que fue localizada en casa de Triana, ya de cierta antigüedad, aunque en buen estado, no tenía número de serie pero no presentaba signos evidentes de borrado. La Sección de Balística Forense de la Policía Nacional recibió tres envíos con segmentos sobre el revólver y una pistola, cuatro vainas percutidas y tres núcleos de plomo recuperados del cuerpo de la víctima, del mismo calibre que parte de los cartuchos intervenidos.

Los cartuchos de tres calibres distintos encontrados en la vivienda también fueron analizados. Uno de ellos correspondía a los de la pistola, otros eran aptos para ser utilizados con el revólver y el último, de calibre oficial, no se ajustaba a ninguna de las dos armas encontradas.

El juicio por el crimen de Isabel Carrasco, que murió tiroteada el 12 de mayo de 2014, afronta desde hoy las pruebas periciales, que esta jornada se centrarán en informes de balística e informáticos. La vista, que alcanza su decimotercera jornada, ha comenzado a las 09.20 horas, con la prueba pericial de balística a cargo de tres agentes de la Policía Nacional de Madrid, que serán los encargados de desvelar las conclusiones de estudio que realizaron del arma homicida y los cartuchos que acabaron con la vida de la víctima. Después, a partir de las 12.00 horas, se abordará la pericial informática, que realizarán inspectores y agentes de Madrid que analizaron en su día los hallazgos encontrados en los ordenadores de las acusadas.

Para hoy también estaba prevista la pericial caligráfica, pero las defensas de las tres acusadas han renunciado a ella.

Por el asesinato del Isabel Carrasco están acusadas Montserrat González, autora confesa de los disparos que acabaron con la vida de la presidenta de la Diputación de León, su hija, Triana Martínez, y la policía local Raquel Gago. Montserrat González declaró ante el tribunal que es la única responsable de la muerte de Isabel Carrasco y admitió que estaba "obsesionada" con ella porque había echado a su hija de la Diputación de León, donde ocupaba una plaza interina como ingeniera de telecomunicaciones, e igualmente consideraba que había cercenado su carrera política en el seno del PP. Las otras dos acusadas afirmaron ante el tribunal que son inocentes y aseguraron que no sabían nada del plan urdido por Montserrat González para acabar con la vida de Isabel Carrasco. No obstante, la Fiscalía acusa a ambas de ser colaboradoras necesarias en el crimen y pide para ellas la misma pena que para Montserrat González, 23 años de prisión.

 

 

 

tracking