León reparte la leña de la poda del Torío entre los vecinos

álvaro caballero | león

Casi tres kilómetros jalonados de pequeñas ‘suertes’ de leña quedan como testigo de la actuación en el cauce del río Torío. Desde la linde con Villaquilambre hasta el entronque con el Bernesga, a la salida de la ciudad, el alcalde de León, Antonio Silván, visitó ayer la ribera del río para revisar el estado en el que ha quedado, después de que se eliminarán cerca de 1.000 metros cúbicos de restos vegetales. Una poda que ahora, como anunció el regidor, queda para que «los vecinos puedan cogerla de forma gratuita», tutelados por los profesionales de la empresa Tragsa, que trasladará lo que quede a las instalaciones de Gersul para que desde allí se conviertan «en compost». «Esto forma parte del ciclo medioambiental y de sostenibilidad», remarcó el primer edil de la capital leonesa.

La actuación da respuesta a «las demandada por los vecinos de Puente Castro», como recordó Silván, quien recalcó que era una «necesaria» y había sido «comprometida» por el Ayuntamiento dentro del «plan de intervención en las riberas de los dos ríos de la ciudad». La labor de los profesionales de Tragsa, a la que se encomendó el proyecto por un presupuesto de 220.000 euros, ha servido para «la retirada de la vegetación que estaba invadiendo absolutamente todas las riberas», así como de la recogida de «los residuos sólidos y el movimiento adecuado de los áridos para dejar el cauce limpio». Unos trabajos con un plazo de cuatro meses a los que ya apenas queda el remate.