Raquel Gago suplica a la Audiencia que confíe en que no se va a fugar y propone firmar dos días a la semana

m.a.zamora | a .caballero | león

Raquel Gago, la agente de la Policía Local considerada culpable de asesinato por el jurado popular del juicio por el crimen de Isabel Carrasco, suplicó ayer a la Audiencia Provincial de León que confíe en que no se va a fugar y mantenga su situación de libertad provisional hasta que se resuelvan los recursos pendientes: «Me he presentado siempre a firmar en los juzgados, sólo pido que tengan confianza en mí como hasta ahora», explicó la procesada en el turno de palabra que le concedió el ponente, Carlos Javier Álvarez, acompañado para esta vista por dos magistrados más, Teodoro Sandoval y Miguel Ángel Ámez.

La vista duró apenas media hora, tiempo en el que Emilio Fernández, en su condición de fiscal, solicitó el ingreso inmediato de Gago en prisión habida cuenta del riesgo de fuga que desde su punto de vista comporta el hecho de que el veredicto haya resultado más contundente de lo previsto para la agente: «Tenía unas expectativas de una pena menor y ahora se enfrenta a una condena que va a ser como poco de catorce años de prisión. Habrá recurso ante el Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León y ante el Tribunal Supremo, pero son extraordinarios y hay muy pocas posibilidades de que prosperen».

Sentimiento de justicia

El representante del Ministerio Fiscal advirtió que para el jurado popular resulta probado que las tres condenadas tomaron café juntas unas horas antes del crimen «en un sano sentimiento de justicia del pueblo que los jueces profesionales solamente pueden supervisar, pero no revisar». Para el Ministerio Público «lo insólito es que la condenada permanezca en libertad».

La letrada de la acusación particular, Beatriz Llamas, se adhirió a las tesis del Ministerio Fiscal pero matizó el apartado cuarto de los razonamientos jurídicos del auto que puso en libertad provisional a Gago con fecha de 29 de enero de 2015, de acuerdo al cual «si las sospechas existentes resultan fundadas» se podría revisar la situación de libertad provisional. «Y es el caso», explicó la abogada.

La otra acusación particular, encarnada por Carlos Rivera, se expresó en los mismos términos y la acusación popular, con Ricardo Gavilanes, insistió en su conformidad.

A criterio de la defensa, el acta del jurado popular «no motivan el veredicto suficientemente» y por este motivo considera que el juicio «tiene muchas posibilidades de repetirse. Fermín Guerrero considera inexistente el riesgo de fuga «porque no lo hizo cuando se pedían para ella 23 años de cárcel» y presentó 6.000 firmas que el ponente no aceptó como prueba. Sí admitió, no obstante, un certificado médico de una consulta para tratar problemas de ansiedad de su clienta en un centro de salud de Valdemoro. «Es incongruente que la consideren culpable de asesinato y que luego la mayoría del jurado esté a favor del indulto».

El abogado ha propuesto que Raquel Gago acuda a firmar dos días a la semana para garantizar que no se va a fugar.