Diario de León

Los exportadores, colapsados por el freno de Fomento a la autopista del mar de Gijón

Evitan la alternativa de Vigo por distancia y han vuelto a transportar todo por carretera con sobrecostes añadidos .

Un camión desembarca del buque que realizaba la ruta de la autopista del mar entre Gijón y Nantes hasta septiembre de 2014. JESÚS

Un camión desembarca del buque que realizaba la ruta de la autopista del mar entre Gijón y Nantes hasta septiembre de 2014. JESÚS

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asun g. puente | redacción

Exportaciones de sectores clave en la economía leonesa siguen aguardando una salida directa al mar para recomponer el colapso logístico en sus mercados con destino al norte de Europa, que el cierre de la ruta Gijón-Nantes provocó hace ya un año y medio. El intento de que la autopista del mar entre Vigo y el mismo puerto francés (Saint Nazaire), unido antes al Musel, sea una alternativa para el transporte en el noroeste del país ha fracasado entre los transportistas leoneses y sectores como la pizarra que han descartado la salida al mar por Galicia y han vuelto masivamente a la carretera, con el consiguiente aumento en el coste de sus rutas. Demandan con urgencia la reapertura de la autopista del mar desde Gijón. Esta exigencia es también primordial para las aspiraciones de León como eje logístico del noroeste.

Una iniciativa privada, de la mano de la Naviera Riva Suardíaz, lucha desde hace más de un año por poner de nuevo en marcha el enlace entre El Musel y Nantes, aunque «las trabas son constantes, desesperantes; es como luchar contra la pared», reconoce el empresario Rafael Riva, de la familia propietaria. Explica que la intención era que la ruta hubiera comenzado a principios de 2016, pero aún no cuenta con la autorización de Puertos del Estado. Busca un barco para adquirirlo y realizar la travesía con una nave propia y confía en iniciarla en los próximos meses.

Entretanto, el principal cliente leonés de la autopista de Gijón, el sector pizarrero, insiste en «los claros perjuicios» del cierre de la salida al mar de su mercancía a través de Asturias. El presidente de la Asociación de Pizarristas de Castilla y León, (Apical), Eliseo López, comenta que «Vigo no es una alternativa para nosotros y desde el cierre de la ruta desde El Musel hemos volcado todo el transporte por carretera con el consiguiente sobrecoste que deben asumir los propios productores».

Prácticamente el 40% del 90% de las exportaciones del sector utilizaban la autopista del mar de Gijón antes de su cierre. Un nudo logístico esencial para llegar a sus puntos de destino de sus principales clientes: Francia, Alemania, Reino Unido y Bélgica, además de las ventas en los países nórdicos. El pasado año el sector facturó 248 millones de euros, un 95% procedente de la exportación, con una producción total de 465.460 toneladas.

López recuerda que la ruta desde Vigo no permite el transporte de camiones con la carga y «tampoco se han dado alternativas, lo que nos condiciona comercialmente e influye en nuestros plazos de entrega». El anuncio de la próxima reapertura de la autopista del mar desde El Musel «es una buena noticia para reducir costes y contar con más variantes de transporte que nos permitan optimizar». Llama la atención sobre el hecho de que ante el estancamiento del precio de la pizarra y costes a mayores, como el mencionado del transporte, «desbarajustan el balance de las empresas, lo que nos obliga a medidas de austeridad». Apical aglutina a 15 empresas y 2.000 trabajadores.

Desde el sector del transporte, el presidente de Altradime, Pablo Lorenzo, ahonda en la necesidad de la reapertura de la autopista del mar Gijón-Nantes. «Los transportistas leoneses no van por Vigo, desde luego, no tiene sentido por cuestiones operativas», remarca. Incide, además, en el apoyo «al cien por cien del sector a esta reapertura; cuantos más medios hay para el transporte en un mundo globalizado mejor». También enfatiza la necesidad de apostar por un mayor número de alternativas para la intermodalidad.

La salida al mar de las mercancías leonesas, principalmente pizarra, madera y hierro, «tenía hasta su cierre otra línea hacia Europa a través de Gijón». Más de medio centenar de camiones, aproximadamente, utilizaban semanalmente esta conexión vía marítima con Francia.

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