El teléfono, siguiente paso
El primer objetivo será el control de los conductores, pero Tráfico tiene previsto ampliar este dispositivo de control, a través de esos 270 radares que se van a instalar a lo largo de 2016, al resto de ocupantes de un vehículo y, en una segunda fase, a los conductores que vayan hablando por teléfono.
La labor del Centro Estrada en este nuevo dispositivo será comprobar que los datos grabados por los cinemómetros no ofrecen dudas y descartar aquellas imágenes borrosas.
El Centro Estatal de Tratamiento de Denuncias Automatizadas (Estrada) tramita cada año más de dos millones de expedientes sancionadores por infracciones en los límites de velocidad y también otras actividades de apoyo a la DGT como atención telefónica y digitalización de documentos.