Vigilancia especial de la policía en la plaza Mayor y el Grano para que no haya vidrios ni menores bebiendo
Se extremará el control en estas dos zonas de la ciudad
La vigilancia para el Entierro de Genarín tendrá dos puntos neurálgicos: las plazas Mayor y del Grano. Dos enclaves, en los que se concentran la mayoría de los asistentes al Genarín, donde se extremarán las medidas de control para que «no entren personas con botellas de cristal y no haya menores que consumen alcohol», avanza Salguero, quien abunda en que se intervendrá para que «no se rebasen los aforos», después de que el último año, ante la acumulación de gente que se quedó en el Grano, la cofradía tuviera que esperar casi dos horas para poder sacar el camión de traslado de los pasos una vez terminada la procesión.
Al margen de que el cortejo del santo pellejero contará también con la escolta de miembros de Protección Civil, la participación de la Benemérita en el operativo servirá para fijar puntos de control en las entradas a la ciudad desde media tarde y hasta rebasada la madrugada, sobre todo para realizar controles de alcoholemia.