LA POLÉMICA
La ULE participó en los criterios de los polémicos cursos del carné por puntos
El Instituto de Automoción colaboró en las pautas que ahora evalúan a las autoescuelas
a.g.v./ agencias | león
El Instituto de Automoción y Fabricación (IAF), dependiente de la Universidad de León (ULE), participó hace tres años en la elaboración de los «criterios objetivos y asépticos» que ahora se han empleado para evaluar a las autoescuelas y adjudicar los cursos para la recuperación de los puntos del carné de conducir.
Tras la polémica suscitada a nivel nacional por el supuesto amaño de la Dirección General de Tráfico en las concesiones, fuentes del instituto leonés explicaron que su trabajo consistió «únicamente» en el diseño, junto con otras entidades, de parámetros «objetivos y totalmente anónimos». De hecho, el contrato de este proyecto se remonta a 2013 y llegó a la Universidad a través de Aisvial, una empresa especializada en auditorías de seguridad vial.
Los criterios diseñados descansan en una evaluación de unas 80 características, que pasan por analizar el local, las condiciones de accesibilidad —como un requisito fundamental—, superficie y número de aulas, acondicionamiento físico y tecnológico, profesorado acreditado, certificación, homologación, etcétera. Los parámetros empleados también responden a la evaluación del horario lectivo, si la autoescuela cuenta con transporte público cercano y con aparcamiento, entre otras cuestiones. Según estos criterios se aplica una puntuación técnica «objetiva y aséptica», explican desde el instituto, recalcando que su posición está «totalmente al margen» de las adjudicaciones.
De hecho, fuentes del centro precisaron que en España existen unas 17.000 autoescuelas, de las cuales sólo unas 7.000 están asociadas a la Confederación Nacional de Autoescuelas (CNAE), entidad que ha pedido que presenten informes para la adjudicación de la recuperación del carné. No obstante, a la convocatoria han respondido poco más de 800 autoescuelas, adjudicándose, a priori, una por cada 80.000 habitantes. «La problemática responde a asuntos políticos y no técnicos», subrayan desde el Instituto de Automoción y Fabricación.
Negación
Por otro lado, la Confederación Nacional de Autoescuelas (CNAE) ha vuelto a negar la existencia de amaños en el concurso para la adjudicación de los cursos de recuperación de puntos del carné de conducir, en un proceso que es «transparente», con varios aspirantes y en el que «no existe monopolio» alguno.
Así lo manifestaron a Efe fuentes de la CNAE, unos días antes de que la Dirección General de Tráfico (DGT) convocara a los siete concursantes que concurrieron a la última oferta para hacerse con alguno o con todos de los cinco lotes en que se dividió el territorio nacional —salvo País Vasco y Cataluña— para la gestión de los cursos. Una reunión cuyo objetivo desconocen las fuentes de la CNAE y que se produce después de las denuncias de algunos de los aspirantes del concurso sobre posibles irregularidades en el proceso, así como de las escuchas ilegales que han salido a la luz de conversaciones que mantuvieron en julio de 2013 el presidente de la confederación, José Miguel Báez, y una subdirectora de la DGT Marta Carrero, que ha sido cesada. Pero la CNAE niega rotundamente amaños en el proceso, recordando que ganó tres de los cinco lotes.
Cabe recordar, que con la entrada en vigor del carné por puntos se abrió un concurso para la adjudicación de los cursos de recuperación, y la CNAE lo ganó por un tiempo limitado a diez años incluyendo prórrogas y con un número máximo de 200 centros.