Manantiales de León comunica a su plantilla que cerrará a final de agosto

l. urdiales | león

Manantiales de León cerrará la actividad en la embotelladora a final de agosto. Ese es el recorrido inmediato de la envasadora de agua de San Miguel de Camino, según comunicaron ayer a los trabajadores los responsables de la compañía, proveedora del gigante Mercadona en la última década. Los planes a corto plazo para toda esta actividad industrial que sostiene el manantial de San Miguel ha causado una sensación de pasmo entre la plantilla, cuando aún no se cumplen tres meses desde que el negocio fue adquirido por Importaco, un grupo empresarial que tiene en la división de bebidas naturales uno de los exponentes que le convierten en referencia del sector alimentario, en el que se yergue como especialista en la elaboración de envasados de frutos secos, desecados, snack y recubiertos de chocolate. La proyección de Manantiales de León se encuadraba desde mayo, desde que la sociedad valenciana compró la empresa leonesa a Font Agudes en la seguridad de un conglomerado que supera los 600 millones de litros anuales envasados; ese volumen blindaba las perspectivas de la factoría leonesa en una corporación que es tercera en el ránking nacional de aguas minerales. Blindaba, porque desde las novedades transmitidas por los responsables de la empresa a los empleados, su proyección laboral tiene otros destinos. O recolocarse en plantas envasadoras que Importaco gestiona en las Islas Baleares, Toledo, o en Huesca, también en la Comunidad Valenciana, o empezar de cero en otro empleo. Los trabajadores consultados por este periódico sobre la nueva estrategia que les trasladó la empresa esperan la llegada de un responsable de recursos humanos del grupo y un asesor legal para determinar con más certeza sus alternativas ante el cierre: o indemnización y trámites para acceder alas ayudas por el desempleo en ciernes o intentar una aventura lejos de León. Manantiales de León se ha convertido a lo largo del último lustro en la empresa con más actividad industrial y económica del municipio de Valverde de la Virgen, donde ha crecido, con esa ubicación privilegiada paralela a la N-120 en San Miguel del Camino, en amplitud de negocio y volumen de materia prima hasta quintuplicar los números de sus primeros pasos. El salto cualitativo de Manantiales de León se produjo en 2010, cuando la anterior propietaria impulsó una marca comercial. Diario de León intentó recabar ayer una impresión sobre estos planes de cierre comunicados a la plantilla en la sociedad Importaco; sin éxito. Los trabajadores esperan que hoy les amplíen detalles de esas perspectivas industriales que antes no tenían límite y desde ahora no pasan del 29 de agosto.