La renta de inserción cada vez sale más barata
El gasto por beneficiario cayó en un año más de 150 euros; cada vez se pide más.
dl | león
El gasto anual por beneficiario de la renta mínima de inserción pasó de los 1.774 euros de 2013 a los 1.622 de 2014, lo que supone 152 euros menos y a pesar de que los beneficiarios crecieron en 7.644 hasta los 33.897 en Castilla y León.
La cuantía de esta renta varía entre los 426 euros por titular al mes —es la misma cantidad que en 2013— y los 692 euros de máximo por unidad familiar.
El Consejo Económico y Social (CES) advirtió ayer de que las rentas mínimas de inserción no están garantizadas por ley en todas las comunidades y ciudades autónomas debido a la heterogeneidad de las normas reguladoras, aunque cada una de ellas cuente con sus programas.
En lo que respecta al gasto anual por beneficiario, tres autonomías —Castilla y León, Madrid, Murcia y Comunidad Valenciana— se han alejado del comportamiento agregado de crecimiento observado en 2014.
En su memoria socioeconómica y laboral, el CES resalta el incremento de 262.307 personas (el 1,5%) en el número de titulares de prestación autonómica en 2014 a nivel nacional (último año con datos disponibles) y también su importe medio, hasta los 420,63 euros, frente a los 418,48 de 2013.
A pesar del incremento de titulares, las personas cubiertas por las rentas mínimas de inserción han disminuido, ya que el número de miembros dependientes no titulares bajó un 7,64% hasta las 350.211 personas, lo que arroja una caída del saldo total de beneficiaros del 3,93 % (612.518 menos).
En 2014 el gasto total de las comunidades autónomas alcanzó los 1.167 millones de euros y la cuantía mínima promedio (titular/mes) subió el 0,94%, hasta los 420,63 euros, tras dos años de descenso, mientras que la cuantía máxima bajó el 0,52%, situándose en 2014 en 664,14 euros.
El CES también subraya que aunque en el conjunto nacional el número de perceptores de rentas mínimas de inserción disminuyó en 2014, el volumen aumentó en todas las comunidades autónomas excepto en Andalucía y País Vasco.
El procedimiento para solicitar esta ayuda no es fácil, por lo que se recomienda el apoyo de un trabajador social. Entre los requisitos para esta ayuda, figura el de estar empadronado en la comunidad autónoma, carecer de recursos económicos suficientes para las necesidades básicas de la vida, haber solicitado ya todas las ayudas, prestaciones y pensiones que le pudieran corresponder y aceptar las medidas de inserción laboral, orientación y formación que proponga la comunidad autónoma, ya que además de una ayuda económica se ponen recursos para intentar que la persona se integre laboralmente.