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Los derribos de inmuebles en León caen a la mitad en apenas cinco años

En 2012 fueron 28 por 14 el año pasado y en este ejercicio apenas se han concedido 10 licencias.

Vista del edificio que se está derribando en la avenida de Álvaro López Núñez en la confluencia con la calle Federico Echevaría. DL

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León

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manuel c. cachafeiro | león

El número de derribos de inmuebles en la capital ha caído por debajo de la mitad en los últimos cinco años. Y no hay una única causa. Por un lado, la Inspección Técnica de Edificios (ITE) obliga a una serie de mejoras, y muchos propietarios optan por cumplirlas con vistas al alquiler de pisos, y por otro, cada vez son menos los edificios en mal estado que resisten en pie en la ciudad de León, bien porque se han rehabilitado o bien porque se han derribado ya en años anteriores, aunque tampoco hay una regla general, apuntan fuentes del departamento, porque de haber pocos casos se puede pasar dentro de unos años a una aceleración de los expedientes en forma de más derribos, debido a revisión de la ITE en una zona concreta del casco urbano.

El número de derribos en 2012 fue de 28 por 14 el año pasado, según fuentes municipales; es decir, la mitad. En 2013 ya bajó el número de licencias concedidas a 25, el mismo número que se tramitó en 2014. Este año 2016 se han concedido 10 según las mismas fuentes y sólo había uno en tramitación por declaración de ruina, que ya se ha ejecutado, no sin polémica, en el número 20 de la calle Puerta Moneda, polémico porque era la casa natal de Gordón Ordás.

Este año 2016, según las mismas fuentes municipales, deberán realizar la ITE un total de 585 edificios. Se trata de una inspección obligatoria y periódica que deben pasar todas las construcciones de León de más de 40 años con el fin de garantizar su seguridad y salubridad.

La Cámara de la Propiedad Urbana de León considera que se trata una revisión beneficiosa por varias razones. Una ITE favorable revaloriza el edificio, se mantiene mejor en términos de seguridad y evita daños materiales y riesgos físicos para las personas, y por tanto posibles responsabilidades para los dueños.

Además, explican en su web, en el caso de la compra o venta de una vivienda, la inscripción del edificio en el Registro de la ITE acredita su seguridad estructural y salubridad. Los bancos y aseguradoras pueden también exigirla para la formalización de préstamos y seguros.

El Ayuntamiento de León tiene en marcha otros expedientes, como el de las casas afectadas por la construcción de un tramo de la ronda interior desde la Palomera hasta la plaza del Espolón, cuyo proyecto de ejecución está supeditado al desarrollo de los terrenos del antiguo cuartel de Almansa, hoy en vía muerta por la falta de demanda de pisos, y también por el desinterés del Ministerio de Defensa.

El coste, en este caso, alcanza los 4 millones de euros para 25 parcelas, 22 de ellas construidas pero ni siquiera la mitad habitadas, de la manzana formada por las calles Fernando I y Alfonso el Justiciero. Sin ese dinero, que se recoge en el documento de planteamiento urbanístico que maneja el consistorio, la ejecución del tramo no es viable.

Otra circunstancia que se da ahora es el arreglo completo de antiguos edificios para convertirlos en viviendas de lujo, como ocurre en las calles Juan Madrazo o Lope de Vega.