Nombramientos a dedo y dimisiones en bloque dinamitan las bases de Podemos

m. romero | león

Podemos se agrieta. Documentación interna intercambiada entre miembros del partido revela una crisis sin precedentes a escala local y autonómica. Nombramientos a dedo que han provocado dimisiones en bloque y la estampida de simpatizantes en toda la provincia dinamitan a la formación de la transparencia, valor que, según varios escritos a los que ha tenido acceso este periódico, ha sido «aplastado» por el secretario general en Castilla y León, Pablo Fernández, como represalia a las exigencias de las bases de devolver «la democracia» a los mecanismos internos del partido. Este cisma llega en un momento crítico en el que Podemos se devanea a nivel estatal entre las ideologías y estrategias de Iglesias y Errejón, entre continuar con el discurso de confrontación con el sistema u optar por un rostro más contenido.

La alerta saltaba en el mes de mayo, pero no ha sido hasta el pasado día 10 cuando el Círculo de Podemos en León estallaba por los aires. La asamblea aprobaba un devastador documento en contra de la dirección autonómica y de su líder, el leonés Pablo Fernández, en el que se denuncia el nombramiento a dedo del denominado «enlace provincial», una figura que hasta ahora se ceñía a realizar labores informativas y que, con la nueva estructura organizativa impuesta por el núcleo de Fernández, asume un relativo poder sin opción de debate por parte de las bases. «Todo esto es contradictorio con Podemos», señala una parte del manifiesto redactado en León hace dos semanas.

Ética vulnerada

Los integrantes del Círculo de León entienden que la complejidad de la comunidad autónoma hace «necesaria» una organización de carácter provincial «para el buen funcionamiento de Podemos». «Esta estructura organizativa —añaden— tiene que estar basada en la participación, la democracia y la transparencia».

Varios de los principios organizativos de Podemos aprobados en la asamblea de Vista Alegre están siendo vulnerados por la actual dirección de Castilla y León. Por ejemplo, que cualquier modificación de la organización debería ser aprobada por una asamblea ciudadana territorial que nunca ha sido convocada. Como tampoco se ha respetado el artículo 4 de la ética de Podemos, que establece «que todo el mundo tiene derecho al ejercicio del sufragio activo y pasivo en todos los niveles de la organización», lo que el Círculo de León entiende incumplido porque «un cargo tan relevante como el de enlace provincial debe ser elegido conforme a métodos democráticos». No sólo se produce esta situación, sino que la Secretaría autonómica de la organización se comprometió a tener en cuenta a las bases de la provincia para elegir su estructura cuando la decisión de ampliar poderes al enlace provincial ya estaba tomada. Exigen, por estos motivos, la convocatoria de una asamblea territorial para resolver la estructura provincial de León y advierten: «No aceptaremos imposición alguna que viole los principios éticos, organizativos y políticos de Podemos».

Según ha podido saber este periódico, a esta exigencia se han unido otros círculos de la provincia, caso del de la ribera del Torío, que también apela a la transversalidad comprometida por Podemos para resolver un asunto que ya se ha cobrado los primeros trofeos .

El jueves de la pasada semana, todos los miembros de la Comisión de Garantías Democráticas de Podemos en Castilla y León presentaban su dimisión «en bloque y de forma irrevocable» entre demoledoras aseveraciones hacia el líder y su equipo cercano. «La actuación del secretario general y de buena parte de su Consejo de Coordinación ha sido indigna, mezquina y bochornosa» porque prohibieron a la Comisión de Garantías publicar en la web del partido la resolución de los enlaces provinciales, de manera que los círculos y los consejos ciudadanos municipales no fueron notificados.

Critican «la falta absoluta de cooperación» por parte de Pablo Fernández para elaborar un inventario de cargos electos retribuidos del partido y sus datos fiscales. «Lo cierto es que a 31 de agosto, fecha límite, en Castilla y León sólo una concejala de Venta de Baños había remitido la documentación. Ninguno de los demás ha enviado nada».

«La vergonzosa» ausencia de publicación de los criterios de selección del personal retribuido que trabaja para Podemos «supone calcar las prácticas corruptas de la casta al integrar el consabido amiguismo y sumisión tanto de los seleccionados como de quien los nombra», recoge la explicación que han enviado a las bases.

Otra de las denuncias que hacen públicas son «las intolerables presiones» que habrían ejercido cargos de Podemos en cuanto a agilización y estimación de resoluciones por parte de la comisión «en favor única y exclusivamente de su interés».