Una central de compras para los productores agroalimentarios
«Impecable e inmejorable». Así cree Juan Martínez Majo que se puede definir la labor de la Diputación en la defensa y promoción del sector agroalimentario de la provincia, en un trabajo que considera ha ayudado y ayuda a la comercialización de los Productos de León. Recordó los 16 sellos de calidad que atesora la despensa de la tierra, media docena de ellos con sede en el Bierzo, donde —apostilló— la institución mantiene un acuerdo con el Consejo Comarcal en el Banco de Tierras con una ayuda anual de 80.000 euros «para fomentar la incorporación de jóvenes al trabajo en la tierra».
Entre los planes de la institución provincial con el sector agroalimentario, el presidente apuntó la continuación del apoyo al tejido empresarial, con la insistencia en campañas de punto de venta directa en espacios comerciales, como la reciente iniciativa desarrollada en centros Carrefour de Madrid. La Diputación tiene previsto retomar el frustrado proyecto de poner en marcha una central de compras. «Con la llegada de la crisis, Caja España no quiso finalmente avanzar en el plan y lo abandonó, queremos volver a intentarlo», afirmó. También trabajarán en extender el comercio electrónico en el sector e impulsar más las exportaciones. «No deben tener miedo en absoluto al mercado internacional, podemos; tienen productos de calidad, artesanos, innovación».
Una vez más se mostró convencido de la fortaleza del «trinomio» agroalimentación, gastronomía y turismo. «Una de las alternativas más importantes a la crisis minera y un pilar de futuro de la provincia».
En el asunto del turismo, Majo dijo que en León «hay que verlo con complementariedad, siempre digo que son 365 oportunidades». Habló del Camino de Santiago y su potencialidad para León y recordó que la Diputación ha realizado el primer diagnóstico sobre la Ruta Jacobea a su paso por la provincia.
«La actividad turística afecta a muchos sectores, por ejemplo, en el caso de Leitariegos estamos trabajando para que tenga un buen futuro. Es un lugar que atrae a gallegos y portugueses y un espacio idóneo para los principiantes en el esquí», explicó.