Abre la era de las espichas civilizadas

dl | redacción

Recinto vallado, grandes contenedores para depositar los residuos, vasos de plástico, hora de llegada y cierre y amplio dispositivo de vigilancia, con agentes de la Policía Local y efectivos de seguridad privada. La nueva temporada de espichas en el campus de Vegazana arrancó ayer como finalizó el pasado curso: un nuevo modelo para celebrar los botellones tras los graves incidentes detectados en el periodo académico anterior, cuando varias fiestas de facultades y escuelas acabaron con peleas, heridos, miles de kilos de basura esparcidos por el césped y ruidos hasta la madrugada.

La fiesta patronal de la Facultad de Veterinaria inauguró ayer el nuevo curso de botellones sin incidente alguno reseñable, según destacaron anoche fuentes de la Policía Local. Cientos de universitarios se dieron cita en el campus en el recinto vallado para la espicha, con órdenes de evitar disturbios y arrojar basura fuera de la zona permitida.

Música y diversión, con alcohol a precios populares convirtieron a la espicha en un encuentro sin altercados que terminó a la hora fijada sin que hubiera que lamentar incidentes.

Esta misma semana, responsables del Ayuntamiento y de la Universidad mantuvieron un encuentro para coordinar acciones, con el objetivo de evitar altercados en las populares fiestas universitarias e impedir estampas como las que se vieron el curso pasado con miles de kilos de basura esparcidos por las zonas verdes del campus. Controlar la entrada de menores a estas fiestas, vigilar el consumo de alcohol, regular el tráfico o persuadir de la utilización de drogas en el ámbito de la espicha, son algunas de las misiones que la Policía Local tiene encomendadas en estas fiestas.

Al cierre de esta edición no se había producido ningún incidente destacado en la espicha de Veterinaria, aunque la vigilancia aún continuaba.