La Fele reconoce la labor de España Duero en la dinamización de la provincia
La patronal destaca la actividad social y de asistencia de la entidad financiera, especialmente su papel en la creación de la Universidad.
m. j. muñiz | león
«Un instrumento financiero y social que ha favorecido desde su fundación la dinamización de la economía de la provincia de León». Es uno de los aspectos que la Federación Leonesa de Empresarios (Fele) reconoce de la trayectoria de la que durante más de un siglo fue caja de ahorros con sede en León, hoy España Duero, integrada como Banco Ceiss en Unicaja Banco.
La Fele reconoce el próximo día 15 a España Duero como entidad financiera de referencia en la provincia desde hace más de un siglo, en el que ha contribuido a dinamizar la economía leonesa y a favorecer la actividad empresarial. Un acto en el Hostal de San Marcos será el marco de la entrega, en la que la consejera delegada del banco, María Luisa Lombardero, recogerá una placa conmemorativa de manos del presidente de la Fele, Javier Cepedano.
«Su labor como agente financiero, que hizo que sectores emergetnes a mediados del siglo XX como la minería del carbón y la construcción comenzasen a tener una presencia decisiva en el empuje de la economía leonesa», es parte de la tarea que se reconoce con este acto. En el que también señala que «fueron sectores determinantes en la apuesta por el asociacionismo empresarial a través de la Federación Leonesa de Empresarios».
La Fele destaca también la actividad social y asistencial de la entidad financiera. Y destaca la que califica «su gran obra social: la puesta en marcha de la Universidad de León en 1979. Sin la implicación de la entidad financiera no habría sido posible disponer de tan notable campus universitario y de los profesionales altamente cualificados que de allí salen al mercado laboral para mejorar con su formación la competitividad de las empresas leonesas».
Con el reconocimiento la patronal leonesa rinde homenaje a una entidad que es heredera de toda una filosofía de ahorro y apoyo financiero durante más de un siglo. Los intentos de crear una caja de ahorros, que ayudara de manera especial a los leoneses de las zonas agrarias y les librase de la usura que sufrían en caso de necesidad o malas cosechas, fueron constantes durante las últimas décadas del siglo XIX. El empeño de la Sociedad Económica de Amigos del País vio finalmente la luz a finales de 1900, cuando abría sus puertas la Caja de Ahorros de León. Entre sus objetivos, además, fomentar el ahorro entre las clases trabajadoras. Y una final asistencial a través del Monte de Piedad y la Obra Social que están muy lejos de los intereses del sistema financiero actual, al que ha tenido que adaptarse la entidad.
La filosofía de las cajas de ahorro pasaba también por revertir al territorio del que obtenían sus ingresos el beneficio de la actividad financiera.
Con este espíritu, y el de fortalecer lo que entonces se denominó el ‘músculo financiero’ de Castilla y León, los grupos políticos iniciaron a finales de los años 80 las maniobras para fusionar las entidades locales, y crear otras de mayor tamaño, pero que conservaran el espíritu territorial y siguieran volcadas en la inversión en los proyectos locales.
En un primer movimiento se creó Caja España, en 1990, con la unión de las de Zamora, Palencia, la Popular y la Provincial de Valladolid y Caja León.
Los intentos de unir las dos grandes cajas de la Comunidad, para entonces Caja España y Caja Duero, fueron largos y difíciles, hasta que en 2010 se logró conformar Caja España Duero. Para entonces las debilidades del sector financiero eran ya evidentes a nivel general, y las ayudas públicas concedidas para este proceso no evitaron un debilitamiento que llevó finalmente, y tras largas negociaciones, a la absorción por Unicaja Banco en 2014.