Herrera niega que la bicefalia sea un problema y se declara «neutral»
El presidente del PP votará en blanco: «Son personas leales, que comparten proyecto».
efe | valladolid
El presidente de la Junta y del PP de Castilla y León, Juan Vicente Herrera, negó ayer que vaya a haber problemas con la bicefalia que se va a producir por su abandono del liderazgo del partido y garantizó su «neutralidad más exquisita» respecto a las candidaturas que se presenten. «Es preferible la bicefalia a no tener ninguna cabeza», resumió Herrera en una rueda de prensa convocada en la Presidencia del Ejecutivo autonómico para presentar varios acuerdos del Diálogo Social.
Tras definirse como «un hijo del dedazo» de Juan José Lucas y José María Aznar, Herrera argumentó sobre el proceso de primarias que «todo lo nuevo es distinto, pero esto es mejor», y anunció que votará en blanco, «como es lógico».
«Son dos personas —por Silván y Mañueco— a las que quiero, se han criado a mis pechos», recordó el presidente, convencido de que ha tenido «algo que decir» en todas las responsabilidades orgánicas e institucionales que han desempeñado Fernández Mañueco y Silván, a quienes profesó «cariño, confianza y aprecio». De hecho, llegó a catalogar como «bobada» las informaciones que achacaron a Mariano Rajoy la inclusión de ambos en el Comité Ejecutivo Nacional del PP en el último Congreso Nacional: «les puedo decir que esa petición personal es de Herrera».
El presidente pronunció estas palabras en un acto institucional, por lo que reconoció la incomodidad que le producía tener que hablar del ámbito partidista.
Comenzó por decir que no tenía opinión sobre su decisión de no presentar candidatura, pero que le había «consultado al espejo» y «estaba de acuerdo», tras lo que concluyó que su «estado de ánimo es espléndido».
El presidente insistió en que no quiere «incurrir en el sinsentido de prolongar» la situación que reconoció en la última Junta Directiva del PP-CyL, ante la que constató que ya no dedica tiempo suficiente al partido porque se ha centrado en completar su gestión en el Ejecutivo, donde culminará en 2019.
En lo que Herrera no ve problemas es en la bicefalia que deparará el proceso de relevo. Serán «personas leales, que se visten por los pies y que comparten proyecto», zanjó.
Por otro lado, trató de explicar que su propósito ha sido «hacer natural» su relevo orgánico en el momento que tocaba, aunque deslizó que ha habido en los últimos meses «alguna otra circunstancia» que hubiera «podido cambiar» este desenlace, sin detallar a qué se refería.
La próxima semana Herrera convocará una rueda de prensa en la sede autonómica del PP.
Como anécdota final, al ser preguntados los dirigentes sindicales y de la patronal que le acompañaban en la firma de los acuerdos por su opinión ante la decisión de Herrera, sólo tomó la palabra el líder de CCOO, Ángel Hernández: «no tiene mala cara el presidente».