Los informes de los técnicos certifican que no habría problemas de circulación

El proyecto no sólo cuenta con los planos redactados por los técnicos de Urbanismo, sino que se han elaborado los pertinentes informes de movilidad y tráfico por parte de los profesionales del consistorio. Estos dictámenes reflejan que la incidencia de la peatonalización para el tráfico del entorno no sería ni mucho menos problemática. Las avenidas adyacentes absorberían la circulación de vehículos, sobre todo República Argentina, y apenas quedaría un tránsito residual de residentes, autobuses urbanos, servicios y transportes de carga y descarga, aunque estos últimos dentro de unos horarios limitados como existe en el casco histórico. El planteamiento, tendente a reducir el tráfico para mejorar la movilidad urbana sostenible, busca que esta avenida sea una prolongación de la calle Ancha y complete un eje peatonal desde la Catedral hasta Guzmán, casi a la puerta de la estación del AVE. Los grupos de la oposición apoyan ahora esta propuesta, aunque insisten en dar más relevancia a la peatonalización en sí, sea de la manera que sea, que a la solución urbanística que se ejecute para poder realizarla.