Homenaje a la bonhomía de Alonso

pacho rodríguez | madrid

«Ni mi edad ni mi pena...». Palabras mayores que se cortan sobre un buen hombre. Frase de casi al final de Mariluz Suárez, madre de José Antonio Alonso, homenajeado ayer en el Congreso de los Diputados, ausente ella del acto y de la que leyeron sus palabras, resumió mejor que nadie lo que pasó como aquello de que la felicidad debe de ser morirse antes que los hijos. Luego sonó una guitarra y la voz de Amancio Prada, y fue más.

Y así, el Congreso de los Diputados salió ganando al día a día de lo que pasa allí. Y el que goleó fue Toño el del Crucero frente a José Antonio Alonso, ministro o juez, etcétera. Eduardo Madina, María Teresa Fernández de La Vega, entre otros, y con destacada presencia entre el público hasta de la bancada popular con Soraya Sáenz de Santamaría al frente, que se rindieron en elogios ante el político leonés recientemente desaparecido. Aunque la intervención estrella fue la esperada, la del expresidente José Luis Rodríguez Zapatero, que llevó el homenaje en Madrid al barrio del Crucero. Y recordó, en palabras directas, al hijo de José Antonio Alonso, la brillante carrera de una vida corta. Eso sí, vivida apurando el tiempo. De hecho contó como anécdota Zapatero lo mismo que en el homenaje de León: «En lo que era COU, 15.30 horas, cualquier día, todos esperando en la puerta, el último que llegaba era él, porque siempre se estaba despidiendo de una chica», quiso contar su compañero de pupitre y de Consejo de Ministros.

Amancio Prada cantó dos temas durante el homenaje a Alonso. RAQUEL P. VIECO

Tino Rodríguez representó al PSOE leonés. RAQUEL P. VIECO