LA OBRA DEL PALACIO DE CONGRESOS
Las deudas de Estado y Junta en el Palacio impiden hacer la plaza para abrir el Ferial
El Ayuntamiento ya tiene el proyecto de urbanización de Perrault pero no lo licitará hasta que haya presupuestos
álvaro caballero | león
No hay presupuestos, ni cumplimiento siquiera de las partidas del último año por parte del Gobierno y la Junta. Ni están en caja, ni siquiera en el papel oficial. Y mientras no exista al menos la consignación de los fondos, no habrá tampoco apertura del recinto ferial del Palacio de Congresos y Exposiciones, a pesar de que la UTE adjudicataria, formada por Dragados y FCC, tenga previsto entregar el edificio de la cubierta fotovoltaica como muy tarde en el mes de julio. No se podrá inaugurar porque las deudas de las administraciones nacional y autonómica impiden que se pueda licitar la urbanización de las 3 hectáreas de plaza pública, que enmarca el complejo y sin la cual todo el entorno no es más que una gran escollera.
El agujero presupuestario lo abren los 3,4 millones que adeuda la Junta de 2016, cuando sólo pagó 1,559 de los 5 millones comprometidos, y los 1,9 millones del Gobierno, que hizo su última aportación cuando salió Zapatero. En total, son 5,3 millones de débito del ejercicio ya vencidos, a los que se suman los 4 millones del Estado y los 5 millones de la institución autonómica de este año que no tienen aún sustento alguno en sus respectivas cuentas. No llega ni siquiera con los 1,14 millones del Ayuntamiento, que sí ha cumplido.
Este obstáculo hace que no sirva por ahora de nada que el arquitecto francés Dominique Perrault haya entregado ya el proyecto de urbanización de la plaza, por el que facturará otros 200.000 euros más a sumar a los 5,2 millones de euros de sus honorarios y la dirección de obra. Los planos firman una intervención que rondará los 3 millones de euros y que tendrá que ser asumida con los pagos de las administraciones, después de que quedara fuera de las mejoras no valoradas que propuso la UTE en su oferta inicial.
No queda apenas nada de esas intervenciones, salvo los paneles fotovoltaicos. La entonces concejala de Urbanismo, Belén Martín Granizo, decidió eliminar estas labores para tratar de encajar los 6,7 millones de euros de indemnización a las constructoras por los retrasos no imputables a ellas y por la subida del IVA, mientras que a cambio apuntó instalaciones básicas como la electricidad. Ahora, hay un desfase de 10 millones para acabar el Palacio de Congresos y ni siquiera se cuenta con fondos para poder abrir de momento el recinto ferial.