El asfalto ya se extiende entre Santas Martas y Puente Villarente

El asfalto es uniforme a lo largo del tramo en obra de la A-60, que va a prolongar la autovía entre Puente Villarente y Santas Martas. La estructura enlazará en el kilómetro 299 de la Nacional 601, donde temporalmente acabará la nueva entrega que pondrá en servicio el ministerio de Fomento, a finales de 2018, según las últimas previsiones. Al grueso del tramo norte de la A-60 le falta un año, de acuerdo con esos pronósticos, en medio de una actividad febril de máquinas asfaltadoras, movimiento de tierras, camiones, grúas y bañeras. El tiempo, la climatología, ha corrido a favor de obra y en los últimos meses el avance que se ha dado a la traza es suficiente para dejar toda la estructura en pie, incluido el asiento de las capas de rodadura. DE Puente Villarente a Santas Martas ya se distinguen dos cauces de aglomerado que da empaque a la A-60 en todo ese tramo en ejecución.

La A-60 aglutina en este paréntesis el paso por dos viaductos para salvar los ríos Porma y Esla; otro más que sortea los restos de Lancia, en la corrección de un proyecto que en su origen topó con los vestigios de asentamientos de astures y romanos, y ha obligado a plantear la autovía sobre una plataforma de tierra y hormigón que ha transformado para siempre el horizonte del encaje de las vegas de Porma y Esla, tal y como se mostraron hasta ahora. La A-60 conlleva actuaciones colaterales sobre las carreteras nacionales en las que enlaza; en la Nacional 601, donde una rotonda acabará con la recta extensa que conecta Villamoros y el Esla; en la Nacional 625, los enlaces claves para conectar la autovía con la principal arteria de comunicación de la montaña y el este de la provincia leonesa. En todos, la presencia del asfalto ya es una constante.