El conservatorio de La Palomera tendrá 60 aulas y un auditorio con 400 butacas
La Junta ya tiene lista la documentación para sacar a licitación la redacción de proyecto básico y de ejecución.
A. Calvo | León
El nuevo conservatorio municipal de León, que se construirá en la parcela del barrio de La Palomera, tendrá 60 aulas, de las que poco más de la mitad serán de enseñanza instrumental. Además, también está previsto un auditorio con capacidad para 400 plazas, que ocupará 450 metros cuadrados de los 4.244 que tendrá el edificio una vez levantado, previsiblemente, a finales de 2021, ya que, como ya ha indicado el consejero, Fernando Rey, el plazo inicial de agosto se haya retrasado como consecuencia de la aparición de restos romanos en la finca elegida. Estas son las algunas de las exigencias que la Junta recoge en el pliego de condiciones para la licitación de la Redacción de proyecto básico y de ejecución, elaboración de maqueta, dirección facultativa y coordinación de seguridad y salud para la construcción de nuevo Conservatorio Profesional de Música en León . El plazo para que las empresas interesadas presenten sus propuestas ya está abierto y concluirá el 4 de diciembre.
Entre las exigencias de la Consejería de Educación, al igual que en el caso de los colegios y centros educativos, desde la Administración se exige que la solución arquitectónica no sea pretenciosa «ni de construcción complicada» y «debe reflejar su carácter internacional». Además, entre las «recomendaciones», que sea de formas rectangulares y diáfanas para que las instalaciones sean más flexibles ante posibles cambios y se debe tener en cuenta también «la economía de mantenimiento». El edificio no debe tener más de tres plantas y «sin sótano», además de ser accesible.
Biblioteca fonoteca
En los presupuestos para el 2018, la Junta ya ha aprobado una partida presupuestaria de 1,5 millones de euros, que se destinarán en principio a todo el proceso burocrático que dará paso a la construcción del nuevo edificio, después de que la Consejería de Educación hiciera caso a las protestas surgidas en la capital leonesa en contra de su primera propuesta: trasladar el centro educativo a los bajos del estado de fútbol. Opción que levantó a la sociedad y a la comunidad educativa en contra, a pesar de que Fernando Rey consideraba como muy válida la opción y mucho más rápida y económica que la construcción de un nuevo edificio. En las exigencias para la redacción del proyecto básico, consta que el coste del material no debe superar los 3,9 millones de euros.
Entre los espacios que debe tener el nuevo conservatorio de León, una biblioteca fonoteca de 80 metros cuadrados, una sala de usos múltiples y un aula de informática. En cuanto al auditorio, además del espacio para las 400 butacas, también deberá contar con un almacén y dos camerinos, uno para cada sexo. Además, deberá tener una entrada independiente al edificio, de forma que pueda utilizarse fuera del horario lectivo y sin interrumpir las clases, así como un acceso para artistas y servicio que también sea independiente y con capacidad para la carga y descarga de aquellos instrumentos más voluminosos. El almacén también debe estar comunicado con el escenario. Como consecuencia del uso del edificio, la construcción también deberá tener en cuenta la insonorización de los espacios y las aulas destinadas a cada uno de los instrumentos tendrán tamaños adecuados. De este modo, las de los instrumentos de viento serán más pequeñas mientras que las destinadas a la enseñanza de percusión estará localizada cerca de la cabina para esta función, además de próxima al aula de orquesta.
Consta en el informe que la parte administrativa esté ubicada en la planta baja, junto con el auditorio y los espacios de uso más flexible, como la zona de descanso, la cafetería o la biblioteca, que se podrá controlar de forma visual desde los espacios comunes y que también podría estar unida a la cafetería del centro.