Diario de León

LEÓN ■ OBRAS EN UNO DE LOS EMBLEMAS DE LA CIUDAD

Levantan el primer paño del empedrado en la plaza del Grano

El objetivo marcado desde el Ayuntamiento es tener terminada la obra antes de Semana Santa

marciano

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Avanzan las obras en la plaza del Grano. Mientras frente a La Piconera se mantiene cerrado el espacio de la cata arqueológica, en el lado opuesto de la plaza, justo delante de la puerta del convento de las Carbajalas, las máquinas ya han empezado a levantar el primer paño de cantos rodados del Grano.

La planificación de los trabajos marca que ahora se procederá al asentamiento de la base sobre la que se colocan los morrillos, después de cribar las tierras actuales para que sirvan de cama a la colocación de los morrillos, sin perder el dibujo que ya tenían, pero a la altura de los nuevos bordillos.

Bajo las espinas, que son las vías de desagüe, se colocará una mezcla con una parte de cemento, 4 de cal, 6 de arena lavada y 6 de arena de piñoncillo. En las maestras se reduce a 4 de tierra de la plaza, una de arena y dos de cal, y en el alomado, la misma dosificación con una menos de cal.

La intervención, tal como estaba previsto, empieza por levantar el empedrado del núcleo central del espacio histórico para asentar la base y volver a colocar, uno a uno, los cantos rodados sin perder el mismo dibujo que tienen en la actualidad, como se apunta en el proyecto firmado por el arquitecto Ramón Cañas Aparicio.

El objetivo marcado desde el consistorio pasa por tener entregada la obra antes de Semana Santa, que este año comienza el 23 de marzo, con la tradicional procesión del Viernes de Dolores, en la que la plaza del Grano forma el escenario. Aunque muy ajustado, como admiten los promotores, el cumplimiento dependerá de que las condiciones meteorológicas no resten jornadas de trabajo por la abundancia de lluvia.

El proyecto de Cañas, que ejecutan Domingo Cueto y Decolesa con un presupuesto de 293.284,93 euros, reseña que sólo habrá cemento en las espinas, que son los líneas de desagüe en los que las piedras tienen una disposición diferente, donde apenas habrá una parte de este material por cada 4 de cal, 6 de arena lavada y 6 de arena de piñoncillo. La dosificación cambiará en las maestras, que son las marcas perpendiculares, en las que mezclarán 4 partes de arena cribada de la plaza, una de arena y 2 de cal; mientras que en el alomado irán 4 de arena cribada, una de arena y una de cal. Sobre esta cama se hincarán los morrillos, retacados con 10 partes de tierra y una de cal, y se completará la actuación con el semillado para favorecer la recuperación del verdín.

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