Medio centenar de pistas en funcionamiento entre León y Asturias
a.g.P. | redacción
La recta final del largo puente con el que arranca diciembre contará con una amplia oferta de nieve entre las estaciones de esquí de León y Asturias. En su conjunto, ofertan 37 kilómetros de superficie esquiable con medio centenar de pistas repartidas por los cuatro espacios blancos que suman los vecinos enclaves invernales de la cornisa cantábrica.
Cinco años después, la nieve vuelve a formar parte de la oferta de ocio durante este puente, después de que las temporadas anteriores no fuera posible esquiar por falta de manto blanco. San Isidro cuenta hoy con 10,4 kilómetros esquiables, al añadir dos pistas en Requejines, hasta ahora cerradas pese a contar con nieve suficiente y estar completamente preparadas. El número total de pistas en los tres dominios en servicio (Cebolledo, Riopinos y Requejines) asciende a una docena con espesores que oscilan entre los 20 y los 40 centímetros.
En Valle de Laciana-Leitariegos, de momento, la oferta se limita a dos kilómetros, con cinco pistas en funcionamiento y seis remontes. Sus espesores son exiguos actualmente: ente 10 y 20 centímetros a la espera de nuevas precipitaciones blancas.
En Asturias, Valgrande-Pajares tiene en marcha 17,3 kilómetros esquiables, el 56% de su superficie total. Están en servicio 21 de las 37 pistas que contabiliza y media docena de remontes. Su manto blanco oscila entre los 50 y 70 centímetros. Y en la vecina estación de San Isidro, Fuentes de Invierno, el número de kilómetros esquiables asciende a 7,2, con once pistas y cinco remontes.