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La selectividad se adelanta al 6 de junio y la de septiembre, al 4 de julio

Por primera vez, las dos convocatorias de la prueba se celebrarán antes de verano.

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León

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A.C. | León

Los alumnos de segundo de Bachillerato de este año se enfrentarán a las pruebas de selectividad una semana antes que sus predecesores del curso pasado, como consecuencia de que en esta ocasión, por primera vez, la prueba de septiembre se adelantará al mes de julio como ya se había anunciado. A expensas de que se publique la orden específica del Ministerio de Educación que regule la prueba para el acceso a la Universidad, la comisión encargada de ello en Castilla y León ya trabaja con fechas concretas. La convocatoria ordinaria se adelantaría a los días 6, 7 y 8 de junio, cuando tradicionalmente estos exámenes se celebraban a mediados de ese mismo mes. El año pasado, por ejemplo, la prueba tuvo lugar del 13 al 16 de junio. También del 13 al 16 de septiembre solía celebrarse la segunda convocatoria, a la que acudían los alumnos que querían subir nota tras la primera prueba y todos aquellos que, tras suspender en primera instancia alguna de las asignaturas de segundo de Bachillerato, debían acudir a septiembre tras su recuperación. Ahora, con el adelanto de los exámenes, las pruebas pasan a julio y las fechas que más suenan son del 4 al 6 de julio, un mes después de los exámenes de la selectividad de junio.

Con la implantación de la Lomce, la selectividad pasó a denominarse Ebau (Evaluación de Bachillerato para el Acceso a la Universidad), ya que en sus orígenes era preciso superarla para titular. Por este motivo, desde Csif, reclaman que se retire esta denominación y acabar con las connotaciones que arrastra. Javier Ampudia, también de Csif, critica que, como ya ocurriera el año pasado, cuando se celebró por primera vez la Ebau, los alumnos aún no sepan cómo les van a afectar los cambios y el hecho de que el adelanto de la convocatoria de junio también condicionará el fin de las clases de segundo de Bachillerato. «Hay que avisar con tiempo a los profesores, porque si ahora el tercer trimestre se queda más corto, deben saber cómo acomodar el temario para que los alumnos puedan ver todo el currículo. La prueba afecta a familias y alumnos y tendrían que saber ya algo», asegura.