Renfe acelera con dos trenes las pruebas de la máxima velocidad del AVE a León

A. G. Puente | redacción

Con el horizonte marcado en el final de la primavera para la puesta en marcha del sistema que permitirá al AVE a León viajar a la máxima velocidad, Renfe acelera estos días las pruebas con el ETRMS sobre el trazado entre la capital de la provincia y Valladolid. Según ha podido conocer este periódico, desde la noche del sábado hasta esta madrugada, los testajes con dos trenes Avant 114 (con cuatro vagones) han sumado 24 horas. Los recorridos se han realizado de forma ininterrumpida durante tres noches desde las 22.00 hasta las 6.00 horas.

Las pruebas se hicieron durante las dos primeras noches con dos trenes, de manera que circulaban de forma simultánea en ambos sentidos de la vía de alta velocidad. Uno de ellos partía de León y paraba en la bifurcación de Vilecha, mientras que el otro salía de Valladolid y tenía como destino final la zona conocida como las Pajareras (en la proximidades de la capital del Pisuerga).

Esta nueva tanda de testajes, tras los realizadas en noviembre con trenes comerciales en todo el trazado después de los protagonizados por el tren laboratorio de Adif Séneca, ha incluido únicamente los kilómetros iniciales del trazado desde cada sentido para comprobar el funcionamiento del sistema de seguridad de máxima velocidad en los cambios de vía.

Y como este tipo de pruebas resultan muy gravosas, por su elevado coste, para Renfe, durante la última noche, cuyos trabajos finalizaron esta misma madrugada, sólo se utilizó un tren.

La próxima cita con las pruebas en la línea de alta velocidad a León no se harán esperar. Están previstas para el fin de semana y ya incluirán el tren 112 (con doce vagones y dos cabezas tractoras). En esta ocasión podrían realizar los testajes en doble composición, un supuesto aún pendiente de prueba, aunque de momento Renfe no ha confirmado este extremo. La línea de alta velocidad de Madrid a León únicamente cuenta con dos trenes en doble composición, uno de ellos está ocupado en realizar el trayecto entre las dos capitales (en determinados horarios) y el otro se encuentra en el taller de Renfe Madrid-Fuencarral sometido a tareas de mantenimiento.

En los testajes de estos días con el Avant 114, los dos trenes alcanzaron los 250 kilómetros a la hora con el sistema ERTMS, mientras que con el 112 del fin de semana se podrá llegar a los 300. Se realizaron siempre de noche y sin viajeros para no coincidir en ningún momento en la vía con los trenes comerciales. A finales de la primavera entrará en funcionamiento este sistema de seguridad en los trenes de la línea de alta velocidad a León, dará el relevo al Asfa, el sistema actual con el que no puede rebasar los 200 kilómetros por hora. Con el cambio, el trayecto entre Madrid y la capital de la provincia restará aproximadamente diez minutos, según las estimaciones de Adif.

Desde que el AVE llegó a León, a finales de septiembre de 2015, la implantación del sistema ERTMS ha sufrido demoras permanentes por uno u otro motivo. En la visita del ministro de Fomento a la ciudad en junio, Ínigo de la Serna, avanzó que podría estar en marcha a principios de este año. A finales de diciembre, en un acto en Asturias, dijo, sin embargo, que sería «antes del verano».

Tras los testajes, el siguiente paso será la certificación definitiva por parte de la Agencia de Seguridad Ferroviaria. La implantación de este sistema cuenta con un presupuesto de 147 millones de euros, un coste que incluye la ejecución y también su mantenimiento durante dos décadas.