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UGT y CCOO rechazan a la nueva gerente de la ULE y denuncian que ha desmantelado la universidad pública

Aseguran que carmen García de Elías llevó adelante el despido de 301 personas y un ERE universitario que los tribunales rechazaron y que costó 12 millones de euros a los presupuestos de la Universidad Politécnica de Madrid

La gerente Carmen García de Elías

La gerente Carmen García de Elías

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EFE

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Los sindicatos CCCO y UGT se han opuesto hoy a la "imposición" de la nueva gerente de la Universidad de León (ULE), Carmen García de Elías, que ha "desmantelado la universidad pública allá por donde ha pasado", han denunciado en un comunicado. Los sindicatos han recordado por medio de un comunicado que la gerente designada por el rector de la ULE, Juan Francisco García Marín, llevó adelante el despido de 301 personas y un ERE universitario que los tribunales rechazaron y que costó 12 millones de euros a los presupuestos de la Universidad Politécnica de Madrid. CCOO y UGT también han criticado el proceso que ha conducido a esta propuesta de nombramiento ya que, a su juicio, ha carecido de la participación necesaria de los órganos legalmente implicados en el procedimiento como el del Consejo Social de la ULE. "Sólo a posteriori hemos podido conocer su currículo sin haberse dado a conocer previamente junto con el del resto de candidatos, por lo que esta falta de transparencia ha originado el rechazo que surge ahora sobre la idoneidad de la persona seleccionada para el puesto de gerente", han manifestado los sindicatos. "No aceptamos la imposición para la ULE de una gerente que hace funciones de liquidadora y ni respeta a los agentes sociales ni entiende que la negociación es el camino para la búsqueda de soluciones y solo contempla la imposición, la amenaza y el miedo", han añadido las dos organizaciones.

Asimismo, tanto CCOO como UGT han insistido en que la modificación, llevada a cabo en febrero, de las características de la plaza de gerente en la Relación de Puestos de Trabajo (RPT) de la ULE, que fue contestada y no compartida por CCOO y UGT, demuestra que el proceso de selección convocado "está viciado de origen".

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