LEÓN ■ MEMORIA HISTÓRICA
Fin a la batalla judicial por los nombres del pasado
El abogado Eduardo Sanz desiste de la vía judicial tras acordar el Ayuntamiento de León suprimir los nombres de calles franquistas. Cree que mantener el asunto en los tribunales podría incluso perjudicar el proceso
El abogado Eduardo Sanz desiste de la vía judicial tras acordar el Ayuntamiento de León suprimir los nombres de calles franquistas.
“No tiene sentido tener un proceso judicial abierto que incluso podría resultar perjudicial cuando ya se ha encontrado una solución”. Es el argumento que ofrece el abogado madrileño de origen leonés Eduardo Sanz para explicar su desestimiento de la demanda que presentó en su día para que el Ayuntamiento de León, en cumplimiento de la Ley de Memoria Histórica, procediese al cambio de nombre de calles y espacios vinculados a la Guerra Civil y a la dictadura franquista.
Después del acuerdo plenario que aprobó la elaboración de un catálogo de vestigios relativos a la Guerra Civil y a la Dictadura para ser expuestos al conocimiento público y proceder a su eliminación, el letrado ve innecesario e incluso contraproducente mantener abierta la vía de los tribunales, declaró a Ical.
León capital cuenta con un total de 34 calles, glorietas o avenidas cuya pervivencia con su denominación actual supone un “manifiesto incumplimiento” de la Ley de Memoria Histórica, según argumentaba la demanda presentada por Ranz y admitida por el juzgado después de que el Consistorio desoyese el llamado derecho de petición que se ejerció en 2015.