León ■ Gastronomía
Más de 70 profesionales intentarán el Guiness del mayor plato de cecina cortada a cuchillo
El reto se llevará a cabo el domingo 27 de mayo en la plaza de la Catedral donde tratarán de cortar un mínimo de 250 kilos
El concejal de Comercio, Consumo y Fiestas, Pedro Llamas; el presidente de la IGP Cecina de León, José Luis Nieto; el maestro cortador de cecina, Agustín Risueño y la Director Técnico, Raquel Factor. CARLOS S. CAMPILLO
La ciudad de León se prepara para celebrar uno de los grandes eventos dentro de la Capital Española de la Gastronomía ‘León, Manjar de Reyes’, que consiste en entrar en el Record Guinnes con el plato de cecina más grande del mundo cortado a cuchillo.
Una cita que tendrá lugar el domingo 27 de mayo en la plaza de la Catedral y que reunirá a más de 70 cortadores profesionales de diferentes puntos de España, para tratar de cortar los 250 kilos que ha impuesto el Record Guiness como mínimo para obtenerlo.
El concejal de Comercio, Consumo y Fiestas, Predro Llamas, aseguró hoy que se trata de “un gran reto”, al ser “un día histórico con el producto más leonés” y que permitirá entrar en el libro Record Guinnes “con letras de oro”.
Será un acreditador oficial de Record Guinnes, venido desde Londres, quien se encargue de certificar la proeza que además, irá acompañada, aunque fuera de concurso, del plato más grande jamás visto, de 12,2 por 13 metros y con capacidad para 2.000 platos.
La cecina cortada será pesada en dos tandas, una primer a mitad de la mañana y una segunda al finalizar el corte. Si en ese segundo pesaje se consigue superar el mínimo de 250 kilos impuesto por la organización, el Record será superado.
El presidente de la IGP Cecina de León, José Luis Nieto, explicó que la cecina cortada será vendida entre el público asistente con un precio de dos euros por ración, que serán donados íntegramente a diferentes entidades benéficas.
“Siempre se hacen estas cosas con jamón, ¿por qué no se van a poder hacer con cecina?”, se preguntó el cortado profesional Agustín Risueño, que se mostró convencido de que este reto supondrá “un antes y un después para el mundo de la cecina”.