León acumula más de 28 M€ en seguros de vida, sólo un 28% de menores de 45 años

maría j. muñiz | león

Previsores. Acumular patrimonio para la jubilación con un nivel de riesgo conservador (una inversión a largo plazo con un rendimiento mínimo garantizado y pocos sobresaltos); y que presta cobertura a situaciones críticas para las economías familiares, como las muertes o invalidez tempranas. Es el perfil de muchos ahorradores leoneses, que tienen invertidos en seguros de vida-ahorro 28,35 millones de euros. Sólo 18 provincias del país acumulan más capital en este tipo de productos de ahorro, aunque en esa lista se encuentran zonas mucho más pobladas, con diferencia, que León.

Del carácter previsor de los leoneses da buena muestra que en este tipo de herramientas (que en buena parte de los casos se suscriben para respaldar préstamos como las hipotecas, a largo plazo y que determinan la capacidad de supervivencia de la economía familiar) es contratada con las compañías de seguros en la provincia en un porcentaje mucho más elevado que en el resto de la Comunidad, ya de por sí conservadora en las inversiones. Casi cuatro de cada diez euros que la autonomía invierte en este tipo de productos (un 37%) los aportan partícipes leoneses.

Según los datos de la patronal del sector asegurador, Unespa, León acumula más de 28,35 millones de euros en productos aseguradores del ramo de vida, muy por encima de los 23 millones de Valladolid, los 12,3 millones de Burgos, los 11,6 de Zamora, 8,2 de Salamanca 7,5 de Palencia, 5,5 de Segovia, 5,3 de Soria o 3,3 de Ávila.

no tan jóvenes

Sin embargo, un rasgo diferencial de los ahorradores leoneses en la inversión gestionada a través de estos productos es que a los jóvenes les cuesta más entrar en estas propuestas. Desde Unespa señalan que sólo un 13% de los ahorradores que invierten en estos productos a nivel nacional son millennials, tienen menos de 35 años. En el caso de León el porcentaje es aún más bajo, un 11,5% de los tenedores de seguros de vida tiene entre 18 y 35 años. Si se les suman aquellos que tienen entre 36 y 45 años (otro 16,2%), resulta que menos del 28% de quienes invierte en este producto es menor de 45 años.

El peso de los mayores de 70 años también disminuye, en general porque recuperan lo invertido para complementar sus prestaciones por jubilación.

Además de la edad, que en la mayor parte de los asegurados es «mediana» (de 35 a 44 años), el estado civil y personal es determinante a la hora de contratar un seguro de este tipo. «La persona con pareja estable es el cliente habitual», más cuando llegan los hijos. Y también cuando se contrata una hipoteca, que en muchos casos exige contratar un producto de este tipo.

Respecto a la ocupación, la mayor parte de los asegurados son empleados (un dato que las aseguradoras no consideran relevante, porque la mayoría de los trabajadores se encuadran en esta categoría); pero sí llama la atención que los profesionales liberales tienen mayor tendencia a contratar este tipo de seguros que los autónomos.

El seguro de vida ahorro es «muy empleado para acumular un patrimonio financiero para el futuro», sobre todo de cara a la jubilación, con un perfil «bastante conservador. Se incluyen en esta categoría productos como el plan de previsión asegurado, las rentas vitalicias y temporales, capitales diferidos, planes de ahorro sistemático individuales, seguros de ahorro a largo plazo y unit-linked (seguros vinculados a activos».