El mal tiempo deja pérdidas de 25.000 euros en Aucalsa
Las intensas nevadas lastraron el tráfico en la AP-66. JESÚS
dl | redacción
La Autopista Concesionaria Astur Leonesa (AUCALSA) tuvo en el primer semestre del año unas pérdidas de más de 25.500 euros como consecuencia de la negativa evolución del tráfico en un periodo marcado por una «pésima climatología» que provocó a su vez un aumento de los gastos de explotación, según la compañía.
El tráfico de turismos en este periodo se redujo algo más del 3%, mientras que el de vehículos pesados bajó un 0,93%, aunque el incremento de los peajes en un 1,91% permitió mantener la recaudación en niveles similares a los de 2017, según comunció la sociedad a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). Así, los ingresos por peaje en el primer semestre se situaron en los 17.204.000 euros, cifra ligeramente inferior a los 17.291.000 euros obtenidos en el mismo periodo del pasado año.
Los gastos de explotación, sin tener en cuenta amortizaciones y provisión por actuaciones de reposición, se situaron en los 5,56 millones de euros, un 12% más que en el mismo semestre de 2017.
Según la compañía, este incremento ha estado motivado «por la pésima climatología de la campaña invernal» que ha supuesto un aumento de los gastos por fundentes y combustible.
Este comportamiento de ingresos y gastos de explotación se concreta en un EBITDA de 11,86 millones de euros, un 5% menor que el obtenido en los seis primeros meses de 2017. La concesionaria de la AP-66, que une León con Asturias, obtuvo el pasado año un beneficio neto de 5,1 millones de euros, 26,4% más respecto al ejercicio anterior. Globalvía, grupo dedicado a la gestión de infraestructuras y participado por tres fondos de inversión internacionales, movió ficha el mes pasado para intentar hacerse con la sociedad Itínere, propietaria entre otras de la sociedad Aucalsa, titular de la concesión de la autopista de peaje León-Asturias. La compañía había adquirido el 55,6% de Itínere a Sacyr, Abanca y Kutxabank por 723 millones, si bien la toma de control no será efectiva mientras no se resuelvan los arbitrajes sobre los litigios que enfrentan a esos accionistas con Corsair, otro fondo de inversión que durante los últimos años ha mandado en el Huerna y en varias autopistas de peaje de Galicia, País Vasco y Navarra que fueron privatizadas en el año 2003.
Desde entonces y contando la privatización, la gestión y explotación de ese grupo de calzadas ha cambiado de manos hasta cinco veces mediante compraventas y reordenaciones accionariales con gran protagonismo de fondos de inversión internacionales.