La Junta volvería a subvencionar a Vestas con un plan industrial creíble
Carriedo critica la falta de compromiso de la empresa con León: «Es una deslealtad total».
miguel ángel zamora | león
La Junta de Castilla y León solamente se plantearía la posibilidad de subvencionar la actividad de la multinacional danesa Vestas en Villadangos del Páramo en el caso de que presentara un plan industrial creíble, según explicó ayer el Consejero de Empleo, Carlos Fernández Carriedo.
«Si la empresa lo quisiera, tendrían apoyo, porque lo han tenido. Han recibido 13 millones de euros desde 2005 y les constaría que podrían seguir realizando inversiones. Pero tienen que presentar un plan industrial porque en el ámbito de la energía tendrían un apoyo claro a las renovables, porque habría apoyo de la Junta y el Gobierno y porque habría compromiso de los trabajadores. Pero no podemos dar ayudas sin un plan industrial de futuro para la planta de León. Si lo hay, seguro que tendrán apoyo. Lo único que nos han ofrecido hasta ahora es una decisión sin futuro para la empresa».
Carriedo se expresó en estos términos ayer, antes de clausurar en León la asamblea general y el Foro de Sociedades Laborales y Empresas Participadas de la Asociación de Sociedades laborales de Castilla y León (AEMTA).
«Los trabajadores nos han tenido y nos tienen a su lado. La empresa anunció que se quedaba algunas líneas de la producción. Esta semana han dicho lo contrario. Estamos del lado de la solución para generar empleo y riqueza. Han recibido ayudas y han esperado justo a que perdieran la vigencia para tomar soluciones de deslocalización», protestó el consejero. Preguntado por la existencia de un plan B respondió: «Tenemos un plan A. La empresa tiene que mantener el empleo y no hay que pensar en otras alternativas. Exigimos una reunión al máximo nivel y que no se den pasos con el ERE de extinción que propone la empresa».
«Nosotros no entendemos a las empresas que no piensan en el interés de las personas ni en el compromiso con el territorio. Es una deslealtad con los trabajadores que han demostrado durante tantos años su compromiso con esta empresa, es una deslealtad con el territorio de León y con España. No solamente importan los números en el corto plazo, también hay un lado humano de las personas», explicó.
